Acné: Una condición que causa incomodidad e inseguridad
El Acné es un proceso inflamatorio que puede presentarse de diferentes formas.
Cuando se presentan las espinillas o mejor llamados comedones, se trata de un proceso no inflamatorio. Se considera proceso inflamatorio cuando existe la presencia de barros o Quistes.
El diagnóstico es básicamente clínico, no existen pruebas específicas que se usen para determinar la presencia de Acné. Por lo general, los pacientes acuden a consulta por lesiones en la cara que suelen causar incomodidad e inseguridad.
Factores de riesgo asociados
El Acné es una afección que tiene múltiples causas, algunas de las más comunes son:
- Hereditarias: cuando existe una predisposición a desarrollar Acné
- Hormonal: principalmente durante la adolescencia y en la edad adulta
- Estrés: existe un factor tensional que influye en que aparezcan o se exacerben las lesiones
- Infección
Relación entre las hormonas y el Acné
Los cambios hormonales que ocurren durante la adolescencia favorecen el desarrollo de granitos o lesiones.
Diferencias con otras lesiones
El Acné se caracteriza por la presencia de lesiones específicas. Los granos enterrados o espinillas, que suelen ser blancas o negras, son características de esta enfermedad.
Cuando se trata de un Acné inflamatorio se presentan los granos conocidos como barritos que pueden desarrollar abscesos y formar Cicatrices.
Opciones de tratamiento
El tratamiento del Acné suele ser principalmente tópico. En algunos casos, cuando los antibióticos tópicos no son suficiente, se recurre a los antibióticos orales o un tratamiento combinado según el tipo de Acné, las características y la gravedad de las lesiones.
Esto se determina a través de la exploración física. Es importante que ante la presencia de lesiones como espinillas o barros, la persona evite pellizcarlas o tocarlas, ya que esta es la principal razón de la formación de Cicatrices.