Alergia Alimentaría: es una reacción que consiste en que nuestro organismo percibe como nociva una sustancia
La Alergia Alimentaria es una respuesta anormal y exagerada de nuestro sistema inmunológico ante el consumo de diversos alimentos.
Aunque puede ocurrir con casi cualquier alimento, nueve en particular son responsables de más del 80% de las Reacciones Alérgicas: leche, huevo, soya, trigo, cacahuate o maní, frutos secos como la nuez de árbol, pescados, mariscos y, más recientemente identificado, el ajonjolí o sésamo.
¿En qué consiste Alergia Alimentaria?
Para comprender la Alergia Alimentaria, es importante conocer el funcionamiento del sistema inmunológico. Este sistema está compuesto por diversas células, incluyendo mastocitos, basófilos y células cebadas, que desempeñan un papel en las respuestas inmunológicas. Las reacciones alérgicas son parte de estas respuestas, mediadas por un tipo de inmunoglobulina llamada IgE. En personas con predisposición genética a las alergias, la IgE actúa desencadenando respuestas inflamatorias exageradas tras la exposición a ciertos alimentos.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas de la Alergia Alimentaria pueden variar desde leves hasta potencialmente mortales. Los síntomas cutáneos suelen ser los más evidentes, incluyendo comezón, urticaria y angioedema. También pueden manifestarse síntomas respiratorios, gastrointestinales e incluso síntomas que afectan al sistema circulatorio, como la anafilaxia, una reacción alérgica grave que pone en peligro la vida.
Es fundamental detectar y diagnosticar la Alergia Alimentaria mediante pruebas realizadas por un Alergólogo. Una vez identificado el alérgeno, se debe evitar su consumo y todas las formas en las que pueda estar presente en la dieta. Aunque algunas alergias alimentarias pueden desaparecer con el tiempo, especialmente en niños, otras pueden persistir de por vida, requiriendo precauciones permanentes y el uso de epinefrina como tratamiento para la anafilaxia.
¿Cuáles son las recomendaciones?
Es importante no automedicarse ni confiar únicamente en información encontrada en internet. Ante la sospecha de una alergia alimentaria o cualquier reacción alérgica, es crucial acudir a un alergólogo para un diagnóstico preciso y un manejo adecuado de la condición.