Arterias Carótidas: ¿cuándo se operan y en qué consiste la cirugía?
Las Arterias Carótidas son ramas de la aorta torácica y se alojan en la cara lateral del cuello, son las responsables de aportar sangre a la cara y cerebro. La Carótida Interna, es la encargada de regar el hemisferio cerebral correspondiente (derecho o izquierdo)
Cuando se produce una Estenosis (es decir, un estrechamiento) en dicha arteria, que suele localizarse en su bifurcación, que está aproximadamente en la mitad del cuello, se producen síntomas que pueden afectar al ojo del mismo lado, al lenguaje o a la motilidad y sensibilidad del hemicuerpo contrario a la Arteria Carótida Lesionada, ya que el hemisferio derecho del cerebro "manda" sobre el hemicuerpo izquierdo y el hemisferio izquierdo controla la motilidad y sensibilidad del hemicuerpo derecho.
Para evitar una Lesión Cerebral que pueda acabar en una Hemiplejía (una Parálisis de la mitad del cuerpo) o en la muerte, a estos pacientes se les puede intervenir esta Lesión Carotidea y así evitar nuevos síntomas hemisféricos.
Cirugía de la Arteria Carótida
La cirugía se realiza con Anestesia General y consiste en limpiar la lesión carotidea mediante instrumentos de alta precisión. Luego se procede a cerrar la arteria mediante un pequeño parche de un tejido sintético (dacron o PTFE).
El procedimiento suele durar aproximadamente dos horas y el paciente puede ser dado de alta en pocos días después de la intervención (3-4 días).
Riesgos de la Cirugía
Se puede producir lesión de los nervios del cuello que inervan la lengua y la garganta y también puede ocurrir una Lesión Cerebral más o menos importante en un 1-3% de los casos.
Aun así, los síntomas y el riesgo de padecer un infarto cerebral o la muerte se reducen en un 95%.