Artroscopia de cadera: procedimiento que evita el uso de una prótesis
La artroscopia de cadera consiste en aplicar tracción a la cadera y realizar entre 2 y 3 heridas de aproximadamente 8 milímetros cada una, por las cuales se introduce una cámara y los instrumentos necesarios para reparar la lesión.
¿Qué es la artroscopia de cadera?
La artroscopia de cadera consiste en aplicar tracción a la cadera con un aparato especial y realizar entre 2 y 3 heridas de aproximadamente 8 milímetros cada una, por las cuales se introduce una cámara y los instrumentos necesarios para reparar la lesión.
A través de esta cirugía se puede observar la articulación de la cadera desde adentro y reparar lesiones de labrum, lesiones de tendones y formaciones óseas anormales. Es un tipo de cirugía que tiene aproximadamente 10 años en México, son pocos los traumatólogos entrenados en esta técnica. Para realizarla se requieren algunos instrumentos especiales y aparatos para colocar al paciente en la posición adecuada.
Durante este procedimiento se reparan los componentes propios de la cadera tratando de evitar o colocar una prótesis, en ocasiones se utilizan anclas para fijar los tejidos reparados.
Procedimiento capaz de remodelar lesiones óseas y tejidos
Este procedimiento está indicado en pacientes y deportistas con dolor de cadera que pueden presentar dolor inguinal al caminar o estar sentados, limitación de los arcos de movilidad, dolor en la región glútea y alteraciones en la forma de caminar. En estos pacientes se remodelan las lesiones óseas o se reparan los tejidos lesionados y con esto se puede regresar a las actividades de la vida diaria.
Antes de realizar este procedimiento es necesaria una adecuada exploración física del paciente para detectar clínicamente cuál es el origen del dolor, se complementa con estudios de imagen como radiografías y una artroresonancia magnética de cadera, este último es un estudio en el que se introduce un medio de contraste para evidenciar lesiones en la articulación de la cadera. Con estos elementos se puede realizar una adecuada planeación de artroscopia de cadera.
Indicaciones después de la cirugía
El día siguiente de la cirugía el paciente se puede sentar y caminar asistido de una andadera, dependiendo de la reparación que se realice, se permitirá el apoyo total o parcial de la pierna operada e iniciará con movilizaciones de cadera para recuperar la función normal. Unos días después inicia el programa de fortalecimiento y reeducación de la marcha.