Asma no diagnosticada: Un enemigo silencioso en la respiración

Asma no diagnosticada: Un enemigo silencioso en la respiración

Editado por: Miguel Angel Ortega Tapia el 06/08/2024

En México, hasta el 73% de las personas con Asma no cuentan con el diagnóstico adecuado, ya que se trata de una enfermedad que suele confundirse con otros padecimientos.


Una mal diagnóstico del Asma puede traer consigo múltiples problemas como mala calidad de vida, ausentismo escolar y laboral, mayor uso de servicios de Urgencias y la muerte. Otro dato importante indica que al menos el 30% de las personas tienen un sobrediagnóstico de Asma, es decir, no tienen la enfermedad.


El diagnóstico es complicado debido a las diversas expresiones de la enfermedad y los desencadenantes, como la ausencia de pruebas accesibles en la práctica clínica o la evolución de la afección a largo plazo.


Pronóstico y complicaciones

El Asma es una enfermedad que no tiene cura y el tratamiento consiste en disminuir los síntomas que causan incomodidad. La mayoría de las personas pueden llevar una vida normal siguiendo las indicaciones del personal médico, pero en caso de no llevar un tratamiento se pueden presentar complicaciones como la disminución de la capacidad para hacer ejercicio e incluso, la muerte.


Síntomas del Asma, más allá de la tos y las Sibilancias

Los síntomas del Asma suelen ser distintos de una persona a otra, los más comunes son:

  • Tos persistente
  • Sibilancias
  • Disnea
  • Opresión en el pecho que impide la respiración


Por lo general, las manifestaciones clínicas del Asma se exacerban durante la noche, ante un resfriado o con cambios de temperatura. Algunos factores que pueden intensificar la sintomatología son el polvo, humo, pelo de animales, perfumes, entre otros.


Ante la sospecha de Asma es importante acudir con una persona especialista para realizar un diagnóstico preciso e iniciar un tratamiento que prevenga el daño pulmonar a largo plazo.

 

Asma vs. otras enfermedades respiratorias

Una de las complicaciones diagnósticas del Asma es las similitudes que comparte con otras Enfermedades Respiratorias como el EPOC, la Bronquitis o las Alergias. Por ello, es de suma importancia acudir a una valoración médica para identificar cuál es la afección que se padece.


Bronquitis

El Asma y la Bronquitis comparten sintomatología, específicamente, la Tos y dificultad para respirar. Sin embargo, algunas manifestaciones características de la Bronquitis son:

  • Escalofríos
  • Malestar general
  • Dolor de Cabeza
  • Tos con mucosidad blanca, verde o amarillenta


Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)

Una de las principales diferencias entre la EPOC y el Asma es la edad en la que se manifiestan. Mientras que el Asma afecta principalmente a personas menores de 40 años y, de manera especial, a niñas y niños, la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica se presenta después de los 40 años y como consecuencia del Tabaquismo.


El Asma no está relacionado con el consumo de tabaco, sus principales causas son la Rinitis, Conjuntivitis y Dermatitis.


Alergias

A pesar de que estudios demuestran que 8 de cada 10 casos de Asma son de origen alérgico, hay diferencias sustanciales entre estas condiciones. Mientras que las Alergias se desencadenan por factores ambientales como el polvo, el Asma es una enfermedad crónica del sistema respiratorio.


Pruebas para diagnosticar el Asma

La persona especialista encargada de diagnosticar el Asma se basará en distintos factores, incluidos los antecedentes médicos, la historia clínica y el estado general de salud de la persona. Específicamente, las pruebas que se realizan son las siguientes:

  • Historia Clínica: Para identificar indicios de Asma
  • Exploración Física: Se basa en examinar la nariz, garganta y vías respiratorias superiores. Además, se debe escuchar la respiración en búsqueda de Sibilancias y se analiza la piel en busca de signos de Alergias
  • Espirometría: Se utiliza en personas de 5 años o más para determinar la función de los pulmones
  • Prueba de Provocación: Se realiza después de la Espirometría y busca desencadenar los síntomas del Asma. Para ello, se inhala una sustancia que hace que las vías respiratorias se estrechen
  • Pruebas Pulmonares: No suele utilizarse en niños menores de 5 años
  • Análisis de Óxido Nítrico Espirado: Consiste en respirar por un tubo conectado a una máquina que mite la cantidad de gas de óxido nítrico. Los niveles altos de este gas pueden indicar que las vías respiratorias están inflamadas


Las complicaciones del Asma no diagnosticada

  • Problemas para conciliar el sueño
  • Síntomas que interfieren con actividades cotidianas
  • Estrechamiento permanente de los bronquios
  • Ataques intensos de Asma
  • Muerte


Para evitar complicaciones es necesario acudir a una valoración médica ante la sospecha de Asma.


Viviendo con Asma, un camino hacia la normalidad

El tratamiento del Asma tiene como objetivo aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de la persona. Además, estos deben acompañarse de distintas medidas que aseguren un buen estado general de salud.


Los medicamentos de alivio rápido se indican para lidiar con los síntomas que se presentan durante un Ataque de Asma. Un ejemplo básico es el uso de inhaladores que se debe tener a mano en todo momento.


En cuanto a los medicamentos a largo plazo, la persona especialista podría indicar:

  • Corticosteroides: Para reducir la inflamación
  • Medicamentos biológicos: En caso de Asma difícil de controlar
  • Modificadores de Leucotrienos: Reducen la inflamación y mantienen abiertas las vías respiratorias
  • Estabilizadores de los Mastocitos Inhalados: Previenen la inflamación en caso de interactuar con alérgenos
  • Broncodilatadores: Previenen el estrechamiento de las vías respiratorias
  • Inyecciones contra la Alergia: Reducen la respuesta del cuerpo a los alérgenos


En algunos casos se indica la Termoplastia Bronquial que tiene como objetivo adelgazar las vías respiratorias para evitar que se estrechen.


Finalmente, algunas recomendaciones generales que permiten a las personas con Asma llevar una excelente calidad de vida, son:

  • Dejar de fumar
  • Mantener un peso adecuado
  • Controlar los alérgenos
  • Llevar una alimentación equilibrada
  • Realizar actividad física (sólo en caso de tener el Asma bajo control)
  • Higiene del Sueño
  • Controlar el Estrés y la Ansiedad
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