Ataques de Pánico: Cuando la Ansiedad te lleva al límite

Ataques de Pánico: Cuando la Ansiedad te lleva al límite

Editado por: TOP DOCTORS® el 23/10/2023

Los Ataques de Pánico son un Trastorno de Ansiedad que se caracterizan por la aparición abrupta de sensación de peligro inminente, pérdida de control o enloquecimiento. A menudo, estos episodios van acompañados de síntomas físicos como Taquicardia, respiración acelerada, hormigueo en extremidades, náuseas, mareos y zumbidos en los oídos.


Los Ataques de Pánico tienden a manifestarse cuando las personas atraviesan cambios en sus vidas. Por ejemplo, un estudiante que se muda lejos de casa por primera vez o alguien que finalmente obtiene un trabajo deseado, pero siente Ansiedad ante el rendimiento que debería dar. El Estrés acumulativo puede activar áreas cerebrales relacionadas con la alarma y facilitar estos episodios.


La Ansiedad intensa también puede ser un síntoma de otras enfermedades, como trastornos de la Tiroides, Epilepsia o problemas cardíacos, que deben descartarse. La clave para distinguir es preguntar sobre la naturaleza de los síntomas y realizar exámenes de laboratorio específicos.


Prevención y manejo de los Ataques de Pánico

Es imposible evitar la ocurrencia de los Ataques de Pánico, pero se pueden prevenir episodios intensos y debilitantes. El pronóstico es positivo si se detecta y trata a tiempo.


El tratamiento principal implica la ingesta de medicamentos recetados por un especialista en Psiquiatría. Algunos actúan en minutos para reducir la duración e intensidad de los ataques, mientras que otros, de acción continua, evitan su aparición. A menudo, se combinan ambos tipos y, cuando la frecuencia de los Ataques disminuye, se puede suspender el medicamento de acción inmediata.


La Terapia Psicoterapéutica también es beneficiosa, pues ayuda a la persona a comprender que no está en peligro y que la situación mejorará. En algunos casos, se pueden requerir interconsultas médicas para descartar problemas médicos subyacentes.


Ayudar a la persona a comprender que estos ataques, aunque aterradores, no son mortales ni una amenaza para su cordura, es esencial. Perdiendo el miedo, los síntomas se vuelven menos intensos. Con el tratamiento adecuado y el apoyo necesario, la mayoría de las personas puede recuperarse y retomar su rutina diaria.

Psicología en Álvaro Obregón