¡Auxilio! Soy adicto a mi pareja: el daño del Apego Emocional
A nivel social, se tiende a confundir la sensación de vacío interior cuando no se está cerca de la persona amada y se sienten negativos o con el ánimo muy bajo. La sociedad ha definido al amor auténtico como algo que debe estar infectado de adicción.
En realidad, un amor sano es aquel que es característico de una relación de igualdad, donde las dos personas se complementan, dan y reciben, y hay un respeto mutuo. Lo contrario es lo que se denomina apego afectivo o adicción al otro. Alarmantemente, más de la mitad de las consultas de pareja, son en torno al Apego afectivo, lo que deriva en dependencia patológica interpersonal.
¿Cómo saber si tengo apego emocional?
Las principales características son:
- Adicción: cuando el Apego está presente, entregarse es una forma de rendición guiada por el miedo con el fin de preservar la relación como sea
- El bienestar recibido se vuelve indispensable: la urgencia por ver a la pareja es un sentimiento que no ofrece paz y la mente se desgasta pensando en ello, esto como en el mundo de los adictos
- El desapego no es indiferencia: amor y apego no siempre deben ir de la mano. El apego corrompe. El desapego no es desamor, sino una manera sana de relacionarse, cuyas premisas son independencia, no posesividad y no adicción. La persona no apegada es capaz de controlar sus temores al abandono, no considera que deba destruir la propia identidad en nombre del amor, pero tampoco promociona el egoísmo y la deshonestidad
¿Cómo y de qué forma puede tratarse el apego?
Es a través del autocontrol como uno se puede deshacer del apego afectivo y para ello hay que tener en cuenta que detrás de todo apego hay miedo, y más atrás algún tipo de incapacidad. En el apego, el enredo es total y no hay ninguna pócima para acabar con él. Una persona no debe esperar a desenamorarse para terminar una relación y no se consigue el desamor a fuerza de voluntad y razón.
Hay que decir que la ayuda de un psicólogo es fundamental para evitar que estos pensamientos se transformen en un apego mucho más profundo que puede llevar a la total codependencia emocional y afectiva a cierta persona. Cuando se ponen sobre la mesa situaciones tales como la muerte de esa persona o el cambio de residencia, el adicto suele decir que prefiere morir y aparecen Tendencias Suicidas, lo que debe ser tratado de inmediato.