Cirugía de Tiroides, una Intervención Necesaria para Casos de Malignidad
Se trata de una intervención que está dando resultados muy satisfactorios
Ante un problema en la glándula tiroidea se recurrirá a una Cirugía de Tiroides solo en determinados casos. Es una intervención que está dando resultados muy satisfactorios y en los que la experiencia del cirujano puede ser clave.
Las enfermedades más comunes relacionadas con la glándula Tiroides, órgano con función hormonal situado en la región anterior del cuello, son las inflamatorias (Tiroiditis), las derivadas del aumento o descenso de su función hormonal y las tumoraciones tanto benignas como malignas (Nódulos Tiroideos). En general, solo se recomendará Cirugía de Tiroides para aquellos casos de nódulos con crecimiento que provoquen síntomas de compresión local o planteen dudas razonables de malignidad, y en los que haya certeza de malignidad.
Y ese tratamiento quirúrgico dependerá de la patología a intervenir y podrá consistir en la extirpación de un lado o lóbulo del tiroides, o de la glándula en su totalidad. A grandes rasgos podemos decir que los resultados de la cirugía de tiroides, a medio y largo plazo, de todas las enfermedades tiroideas son muy satisfactorios.
Complicaciones de la Cirugía Tiroidea
Respecto a las complicaciones en el inmediato postoperatorio, la frecuencia de estas enfermedades y los avances médicos ha conllevado un paulatino descenso de la mortalidad quirúrgica hasta cifras por debajo del 1%. En el peor de los casos, la complicación más grave que puede producirse tras una Cirugía Tiroidea es una hemorragia en la región cervical intervenida que puede obligar a una cirugía inmediata para evitar los síntomas de compresión traqueal.
En lo que se refiere a la morbilidad, sigue produciéndose una falta de función de los nervios recurrentes, lo que provoca un cambio, temporal o definitivo, del timbre de la voz y el descenso de los niveles de calcio por falta de actividad de las glándulas paratiroides.
La aparición de estas complicaciones puede obedecer a varios factores como el tamaño del tiroides, antecedentes de Cirugías Cervicales previas o la presencia de una lesión maligna. También influye de manera decisiva la experiencia del cirujano en la cirugía de tiroides, pues esa experiencia puede reducir hasta en un 50% el número de casos, además de disminuir el tiempo quirúrgico.