Cirugía de Nariz: Mejora tu respiración y tu apariencia

Cirugía de Nariz: Mejora tu respiración y tu apariencia

Editado por: Luis Ángel Cortina Sánchez el 17/10/2024

La Cirugía de Nariz, también conocida como Rinoplastía, es un procedimiento quirúrgico que puede tener fines estéticos, funcionales o una combinación de ambos.


Dependiendo de las necesidades del paciente y de las recomendaciones del cirujano, la cirugía puede realizarse mediante diferentes técnicas, buscando mejorar la estética facial, la función respiratoria o ambas.


Tipos de Cirugía de Nariz

La Cirugía de Nariz puede dividirse en dos tipos principales: funcional y estética. Cada una de estas tiene un enfoque diferente, pero en muchos casos se pueden combinar ambas en un solo procedimiento.


Cirugía Funcional

El objetivo principal de una Cirugía Funcional de Nariz es mejorar la respiración. Esto puede ser necesario en pacientes con desviaciones del tabique nasal, obstrucciones nasales o problemas estructurales que dificultan el paso del aire. Generalmente, este tipo de cirugía se realiza con técnicas cerradas, donde las incisiones se hacen en el interior de la nariz, minimizando las cicatrices visibles.


Cirugía Estética

La Cirugía Estética de Nariz, por su parte, busca mejorar la armonía facial y resaltar las características únicas de cada persona. Los cambios pueden incluir la reducción del tamaño de la nariz, la corrección de protuberancias, el ajuste de la punta nasal o la mejora de la simetría facial.


En este tipo de procedimientos, se pueden utilizar tanto técnicas cerradas como abiertas, dependiendo de las necesidades del paciente y de la evaluación del cirujano.


Técnicas de la Cirugía de Nariz: Abierta o Cerrada

El cirujano decide cuál técnica utilizar basándose en el caso específico del paciente, su entrenamiento y la complejidad de la operación.

  • Técnica abierta: en esta técnica, se realiza una pequeña incisión en la base de la nariz, lo que permite una mejor visualización de la estructura interna. Se utiliza principalmente en cirugías estéticas o en casos complejos
  • Técnica cerrada: se realiza sin incisiones externas visibles. Esta es la opción más común en cirugías funcionales, ya que permite acceder a las estructuras internas a través de las fosas nasales


Beneficios de la Cirugía de Nariz

La Cirugía de Nariz ofrece múltiples beneficios, tanto para la salud como para la estética. Algunos de los principales beneficios incluyen:

  • Mejora de la respiración: el objetivo principal de la cirugía funcional es permitir un flujo de aire libre a través de las fosas nasales, mejorando significativamente la capacidad respiratoria del paciente
  • Armonía facial: la Cirugía Estética de Nariz busca equilibrar las proporciones faciales, lo que puede mejorar la autoestima y la satisfacción con la apariencia personal
  • Solución de problemas estructurales: la corrección de Desviaciones Nasales o Deformidades Congénitas puede aliviar problemas crónicos, como sinusitis o dificultad para dormir debido a obstrucciones respiratorias


Posibles complicaciones y riesgos

Como en cualquier cirugía, existen algunos riesgos asociados que deben considerarse antes de someterse al procedimiento. Sin embargo, con un cirujano experimentado y los cuidados postoperatorios adecuados, estos riesgos son mínimos.


Algunas de las complicaciones más comunes son:

  • Sangrado: puede ocurrir durante o después de la cirugía, aunque suele ser controlado por el equipo quirúrgico
  • Infección: aunque es raro, puede requerir tratamiento con antibióticos
  • Hematomas: colecciones de sangre bajo la piel que, en algunos casos, deben ser drenadas
  • Perforación del tabique: en cirugías funcionales complejas, puede ocurrir una perforación en el cartílago del tabique nasal


Cuidados postoperatorios

La recuperación de una Cirugía de Nariz varía según el tipo de procedimiento realizado. Es importante seguir las recomendaciones del cirujano para asegurar una curación adecuada y evitar complicaciones.

 

Después de la cirugía, se recomienda un reposo relativo de 3 días. Durante este tiempo, el paciente debe mantenerse en casa y evitar movimientos bruscos, aunque puede continuar con actividades ligeras.


El cuarto día, el cirujano realiza una curación para limpiar las fosas nasales y asegurarse de que no haya complicaciones inmediatas, como infecciones o costras que puedan interferir con la respiración.


Para reanudar actividades físicas intensas o ejercicio, es necesario esperar entre 3 a 4 semanas. Esto permite que los tejidos cicatricen adecuadamente y minimiza el riesgo de complicaciones.


Los cambios más notables suelen observarse durante el primer mes, especialmente en la forma de la nariz. Sin embargo, los resultados finales pueden tardar entre 6 meses a un año en ser visibles, ya que los tejidos requieren tiempo para cicatrizar por completo.

 

Evaluaciones previas a la Cirugía Nasal

Antes de realizar cualquier Cirugía de Nariz, es fundamental que el paciente se someta a una serie de evaluaciones médicas. Esto asegura que esté en condiciones óptimas para el procedimiento y minimiza los riesgos de complicaciones.

  • Estudios de laboratorio: es necesario verificar que los parámetros como la función renal, hepática y la coagulación sanguínea estén dentro de los rangos normales
  • Evaluación cardiológica: en pacientes mayores de 40 años, se recomienda una valoración cardiológica para asegurar que la cirugía sea segura


Si el paciente presenta alguna enfermedad no diagnosticada previamente, es importante tratarla antes de proceder con la cirugía.


La Cirugía de Nariz es un procedimiento versátil que puede mejorar tanto la funcionalidad como la estética nasal. Ya sea para solucionar problemas respiratorios o para lograr una mejor armonía facial, es importante contar con un médico experimentado y seguir las indicaciones para garantizar una recuperación exitosa. 

Otorrinolaringología en Miguel Hidalgo