Cirugía Refractiva con Láser contra los defectos de Refracción
La Cirugía Refractiva con Láser es el procedimiento más común actualmente utilizado, dentro de los empleados para erradicar los defectos de refracción
El 98% de los defectos de Refracción se pueden tratar mediante Láser. Van desde Miopía hasta Astigmatismo, pasando por Hipermetropía, aunque por número y prevalencia, es la Miopía el defecto más tratado. En algunos casos se puede utilizar también para compensar el defecto de la Presbicia.
Beneficios y riesgos de la Cirugía Refractiva con Láser
Prácticamente desde el momento en que se realiza la intervención, el paciente tiene la posibilidad de poder realizar con total normalidad su vida cotidiana, tanto a nivel laboral como en hobbies, sin la necesidad de portar gafas o lentillas.
Algunos beneficios que destacan son:
- La duración del procedimiento es de aproximadamente 10 minutos
- No duele
- El tiempo de recuperación es de aproximadamente 3 días.
¿Existen riesgos?
En cuanto a los riesgos que conlleva la intervención, al igual que cualquier procedimiento quirúrgico de cualquier patología y especialidad, no está exenta de riesgos. Hoy en día, gracias al Láser de femtosegundo, podemos decirle adiós a los cortes con navajas y microqueratomos.
Con esta tecnología los resultados son aun más precisos, pero lo más importante es la seguridad que nos brinda durante el procedimiento. Es importante mencionar que esta tecnología no se encuentra disponible en cualquier ciudad u hospital .
Recuperación tras la intervención
El paciente, como ya se ha hecho mención, puede llevar una vida normal, pero, aunque no porte gafas ni lentillas, sigue teniendo un ojo miope o hipermétrope en lo que respecta a la estructura ocular. Por tanto, se debe realizar de forma preventiva una revisión anual, al igual que si no se hubiera intervenido.