¿Cómo hacer un lavado nasal en casa?
Los lavados nasales son una técnica recomendada por especialistas en Otorrinolaringología para mantener una buena higiene nasal y aliviar síntomas como congestión y secreción.
Existen dos opciones para llevar a cabo esta práctica: comprar una solución ya preparada en farmacias de confianza o preparar una solución salina casera siguiendo las indicaciones adecuadas.
Preparación de solución salina casera
Para aquellos que deseen preparar la solución salina en casa, el proceso es sencillo y seguro:
- Añada 1 taza (240 ml) de agua purificada en un recipiente limpio. Si se utiliza agua del grifo, es fundamental hervirla previamente para esterilizarla y luego dejarla enfriar hasta que esté tibia.
- Añada media cucharadita (2.5 g) de sal de mar al agua. Es importante evitar la sal de mesa, ya que contiene yodo, que puede ser irritante para la mucosa nasal.
- Añada media cucharadita (2.5 g) de bicarbonato de sodio para ayudar a mantener un equilibrio adecuado en la solución.
Cómo realizar el lavado nasal en casa
Para utilizar la solución salina casera como lavado nasal, siga los siguientes pasos:
- Llene una jeringa médica grande (sin aguja) o un frasco blando para rociar con la solución salina.
- Inserte suavemente la punta dentro de una fosa nasal y rocíe el líquido con suavidad.
- Apunte el chorrito de solución salina hacia la parte trasera de la cabeza, no hacia arriba, para evitar molestias.
- Permita que el lavado salino fluya a través de la nariz y salga por la boca o la otra fosa nasal.
- Después del lavado, suene su nariz suavemente, a menos que su médico le indique lo contrario.
- Repita esta práctica 4 veces al día en cada fosa nasal.
Recomendaciones y consideraciones
Para aprovechar al máximo los beneficios del lavado nasal en casa, tome en cuenta lo siguiente:
- Realice el lavado salino antes de usar otros medicamentos nasales. Esto ayudará a que los senos paranasales absorban mejor el medicamento.
- Si lo prefiere, puede entibiar ligeramente la solución salina antes de usarla, pero asegúrese de que no esté caliente para evitar quemaduras.
- Es normal que, al principio, el lavado salino cause una sensación de ardor en la nariz. Con el tiempo, la mayoría de las personas se acostumbran y encuentran alivio con su uso.
- Como complemento a los lavados nasales, se sugiere utilizar un humidificador en el cuarto donde duerme. Esto ayudará a mantener el ambiente más húmedo, lo que puede ser beneficioso para la salud nasal.
Realizar lavados nasales de manera regular es una práctica sencilla y efectiva para mantener la salud de las vías respiratorias y prevenir molestias nasales. Consulte siempre a un especialista para recibir una evaluación adecuada y una guía personalizada sobre cómo realizar esta técnica de manera segura y efectiva.