Control Prenatal: vigilancia en el Embarazo
El Embarazo es una de las etapas más importantes en la vida de una mujer y requiere de cuidados especiales para llegar a un buen término, por ello, es de suma importancia seguir un Control Prenatal.
El Control Prenatal va más allá de sólo acudir a un Ultrasonido y ver al bebé en la pantalla, es una herramienta que ofrece asesoría a la mujer sobre el Embarazo, parto y cuidados del recién nacido.
En cada consulta, el especialista en Ginecología y Obstetricia promoverá conductas saludables en la embarazada y realizará ciertas intervenciones para prevenir o detectar a tiempo complicaciones que pueden poner en riesgo al bebé.
Además, el Control Prenatal debe dar soporte emocional a la embarazada y a sus familiares, ya que en esta etapa se experimentan muchas emociones. Por ello, es importante que pueda expresarse libremente y explicar al especialista todas sus molestias.
Objetivos del Control Prenatal:
- Evaluar la salud de la mamá e identificar señales de Embarazo de Riesgo
- Saber cuántas semanas tiene de Embarazo
- Diagnosticar o valorar la evolución de enfermedades previas a la gestación
- Reducir el riesgo de complicaciones, como el parto prematuro
- Aliviar las molestias propias de esta etapa
- Solicitar estudios de laboratorio básicos, así como de tamizaje de seguimiento o para diferentes enfermedades
- Realizar Ultrasonido obstétrico, que puede ser endovaginal (para Embarazos tempranos) o abdominal (para el seguimiento)
¿A partir de qué momento se deben iniciar las consultas de Control Prenatal?
Se debe iniciar el Control Prenatal lo más pronto posible una vez que la mujer sepa que está embarazada.
La recomendación para un Embarazo de bajo riesgo es acudir a una consulta mensual. En uno de alto riesgo la visita puede ser semanal o quincenal para supervisar el avance de la gestación y ordenar estudios en caso de ser necesarios.