¿Cuál es la función del hígado y la vesícula biliar y por qué es importante cuidar de ambos?
El hígado es el segundo órgano más grande de nuestro cuerpo, después de la piel. En promedio, pesa un poco más de 1 kilo y su tonalidad va del rojo oscuro al marrón, el cual cumple más de 500 funciones, entre ellas, se destaca el combate de infecciones, neutralización de toxinas, producción de proteínas y hormonas, control de los niveles de azúcar en sangre y la ayuda para una buena coagulación.
Un hígado sano se encarga de purificar la sangre, convertir los alimentos en energía y producir bilis para ayudar a desdoblar las grasas en el intestino. Se limpia a sí mismo y funciona como regulador de la cantidad de sangre en el organismo, entre otras funciones. Todo esto lo convierte en un órgano clave, el cual afecta todos los sistemas del cuerpo y por lo tanto impacta considerablemente la calidad de vida.
La cirrosis, hepatitis e hígado graso son 3 de las enfermedades más frecuentes y pueden evitarse al limitar el consumo de grasas, medicamentos y bebidas alcohólicas. Los malos hábitos obligan al hígado a trabajar el doble, lo cual lo intoxica y puede llevarlo a desarrollar una de las enfermedades ya mencionadas o incluso cáncer de hígado.
Vesícula biliar y sus funciones
En el caso de la vesícula biliar su función principal es recibir la bilis que produce el hígado y aumentar el espesor de ésta, lo cual facilita la digestión de las grasas de los alimentos, nivela el colesterol y evita la formación de cálculos biliares. De esta forma nuestro organismo se desintoxica y puede funcionar óptimamente. Aunque los síntomas pueden variar, los trastornos del conducto biliar suelen presentar las siguientes señales de alarma:
- Ictericia (coloración amarillenta de piel y el blanco de los ojos)
- Dolor abdominal (especialmente en el lado superior derecho del abdomen)
- Náuseas o vómitos
- Pérdida del apetito
- Fatiga
- Fiebre o escalofríos
- Orina color marrón claro
- Heces grasas o de color arcilla
Si has tenido alguno de los previos síntomas o si algún familiar presenta una o más de estas señales te recomendamos acudir con un especialista.