Infarto de Miocardio: La importancia de la atención inmediata

Un Infarto de Miocardio es el bloqueo agudo de una de las arterias coronarias del corazón, lo que interrumpe el flujo sanguíneo a este órgano vital.

El bloqueo puede provocar Isquemia Cardíaca que puede culminar en Necrosis del Músculo o Infarto del Miocardio.

Atención del Infarto de Miocardio

Señales de alerta

Los síntomas que comúnmente se manifiestan en esta afección incluyen:

• Dolor en el Tórax
• Sensación de opresión
• Dolor de cuello, mandíbula y brazo izquierdo
• Sofocación
• Falta de aire
• Sudoración
• Sensación de desvanecimiento

Opciones de tratamiento

El objetivo es desbloquear la arteria obstruida. Una de las opciones más recomendadas es la Angioplastía Coronaria, un procedimiento de mínima invasión que consiste en introducir un Catéter dentro del sistema vascular hasta llegar a las arterias coronarias. Posteriormente, se aplica un medio de contraste para localizar el sitio de obstrucción y, a través de un alambre guía, se coloca un globo plegado que tiene una malla de metal llamada Stent Coronario. Este dispositivo permite reestablecer el flujo sanguíneo.

Otra opción, recomendada cuando la obstrucción es causada por un coágulo de sangre, consiste en administrar un medicamento trombolítico.

Además del tratamiento, es sumamente importante que, una vez que se manifiestan los síntomas, acuda de forma inmediata al hospital más cercano para asegurar una atención inmediata.Se ha demostrado que tratar esta condición durante la primera hora después de la presencia del primes síntoma, permite que el tratamiento tenga su máximo beneficio.

Cuidados especiales

Después de un Ataque Cardíaco o Infarto al Miocardio, los cuidados especiales están encaminados a mejorar la calidad de vida de la persona. Algunas recomendaciones generales incluyen:

• Dieta equilibrada
• Actividad física regular
• Rehabilitación Cardíaca
• Seguimiento del tratamiento médico
• Estudios periódicos

Las personas que tengan factores de riesgo cardiovascular, como la Diabetes, Hipertensión, altos niveles de Colesterol, Obesidad, Tabaquismo, sedentarismo o que presenten un alto nivel de Estrés, tienen un riesgo mayor a presentar eventos cardiovasculares. En estas situaciones se recomienda acudir de forma anual con una persona especialista para evaluar la función cardíaca y prevenir un Infarto del Miocardio.