Depresión: ¿Cuál es el papel de la familia durante el proceso terapéutico?
La Depresión es un trastorno mental que se caracteriza por la presencia de un bajo estado de ánimo y sentimientos de tristeza.
Este estado puede durar más de dos semanas y cuando esto sucede, es recomendable acudir con una persona especialista.
Los síntomas más comunes de la Depresión son:
· Tristeza
· Sentimiento de vacío
· Pérdida de interés
· Pérdida o aumento del apetito
· Insomnio o dormir demasiado
· Pensamientos suicidas
Es importante que cuando le persona presenta el último síntoma señalado, acuda inmediatamente con una persona especialista en psicología.
Causas de la Depresión
Existen diversos factores que predisponen el desarrollo de esta condición, por ejemplo, en algunas ocasiones se trata de un trastorno que se hereda de padres a hijos. Además, una persona puede deprimirse cuando suceden cosas estresantes en la vida como la muerte de una persona cercana, de una mascota, la presencia de afecciones o enfermedades como el Cáncer, la pérdida de un trabajo importante, un divorsio e incluso por aislamiento social en el caso de adolescentes y personas adultas mayores.
Enfoques y proceso terapéutico
Todos los enfoques terapéuticos son capaces de tratar la Depresión. Existen algunos que requieren más tiempo como el Psicoanálisis y otros que constan de menos sesiones como la Terapia Cognitivo Conductual.
El trabajo terapéutico dependerá de la gravedad de la Depresión. Cuando se trata de una afección mínima, puede ser que el proceso concluya en un lapso de dos a tres meses, sin embargo, si se trata de una Depresión grave o moderada es cuando también se requiere la intervención de una persona especialista en Psiquiatría con una duración aproximada de seis meses.
El papel de la familia
Es muy importante que la familia construya un ambiente de apoyo en torno a la persona que atraviesa la Depresión. Si la familia genera situaciones hostiles la persona puede entrar en conflicto, tardar más en recuperarse o incluso abandonar la terapia.
Es recomendable que las personas alrededor eviten conversaciones negativas, sean amables y que no reclamen o forcen situaciones. Sobtetodo, es importante no hacer comentarios comunes como “échale ganas” que puedan hacer sentir impotente a la persona que atraviesa la Depresión.
Finalmente, es probable que durante el proceso terapéutico se mantenga una Terapia Familiar para que las personas cercanas aprendan sobre el tema y se construya un ambiente de apoyo y colaboración.