Dióxido de Cloro, agente potencialmente peligroso para la salud
Tomar este oxidante puede perjudicar gravemente la salud
El Dióxido de Cloro es un agente oxidante, que tiene como uso principal el tratamiento del agua, aunque también es un maravilloso blanqueante, pero es una sustancia tóxica y peligrosa para la salud de las personas.
Recientemente, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), explicó que tanto el consumo de soluciones de Dióxido de Cloro y de Clorito de Sodio conllevan a un grave riesgo y no debe ser utilizado para nada.
Por ello, trabajó arduamente con la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) para lanzar diferentes comunicados sanitarios y evitar que la gente haga uso de estos.
¿Por qué se consume?
Se cree que el consumo de esta sustancia es un remedio casero efectivo y barato para curar enfermedades como la Malaria, Autismo, Cáncer, Enfermedades Parasitarias y Degenerativas, esto dentro de las creencias populares y su fama es de boca en boca.
Sin embargo, no existe ninguna prueba científica que avale estas supuestas propiedades y los productos no se han sometido a ningún tipo de evaluación o autorización por las autoridades competentes para garantizar la relación beneficio/riesgo, por lo que sigue siendo prohibido para su consumo humano.
Y es que tomar este oxidante puede perjudicar gravemente la salud y generar síntomas como: Dolor Abdominal, Náuseas, Vómitos y Diarrea, que pueden llevar a la deshidratación, Fallo Renal, Anuria, Anemia Hemolítica y Metahemoglobinemia.
Cabe mencionar, que, al ser inhalado, se provoca irritación ocular o respiratoria, además de broncoespasmos e incluso Edema Pulmonar.
¿Cuáles son los usos del Dióxido de Cloro?
El Dióxido de Cloro (ClO2) es un compuesto químico que consta de un átomo de cloro y dos átomos de oxígeno. Es un gas de color rojizo a verde amarillento que se disuelve en agua a temperatura ambiente.
La química del Dióxido de Cloro se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones industriales, petróleo y gas y alimentos.
En la producción de alimentos y bebidas es bastante útil para el agua como un agente antimicrobiano, así como para el procesamiento de aves de corral y para lavar frutas y verduras.
En el ámbito médico, es empleado para esterilizar los equipos médicos y de laboratorio, las superficies, habitaciones y herramientas.
Se sabe que el Dióxido de Cloro en cantidades apropiadas, es seguro y eficaz para eliminar las bacterias de Legionella en entornos hospitalarios, así como la llamada Enfermedad del Legionario, un tipo de Neumonía potencialmente mortal causada por la bacteria Legionella pneumophila.
De acuerdo con información emitida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se puede utilizar también en tratamientos de piscinas privadas, como alternativa al hipoclorito para mantener limpia y desinfectada esta zona, sobre todo al ser un sitio donde se reúne mucha gente.
Por todo lo anterior, el Dióxido de Cloro está estrictamente prohibido para el uso y consumo humano, porque podría provocar daños irreversibles e incluso la muerte.
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