Duelo: Entendiendo las emociones que acompañan la pérdida

Duelo: Entendiendo las emociones que acompañan la pérdida

Editado por: Luis Ángel Cortina Sánchez el 22/10/2024

El Duelo es una experiencia emocional profunda que afecta a las personas de diversas maneras. Cuando perdemos a un ser querido, el impacto en nuestras emociones y conductas puede ser significativo, a veces incapacitando la capacidad de realizar actividades cotidianas.


¿Cuáles son las manifestaciones emocionales más comunes en el Duelo?

El Duelo se manifiesta de diversas formas, afectando tanto nuestras emociones como nuestras conductas. Estas son algunas de las emociones más frecuentes que pueden surgir durante el Duelo:


Ira

La ira es una de las emociones más comunes en el Duelo. Puede surgir debido a la frustración de no haber podido evitar la pérdida, o al sentir que la vida ha sido injusta. Muchas personas experimentan una mezcla de rabia y resentimiento, ya sea hacia ellas mismas o hacia la situación.


Ansiedad

La Ansiedad es otra manifestación emocional muy frecuente. Algunas personas sienten ataques de pánico o episodios de ansiedad tan intensos que requieren atención médica. Este miedo proviene de la incertidumbre de cómo será la vida sin esa persona que se ha ido.

 

Culpa

Sentir culpa es habitual en el Duelo, especialmente al reflexionar sobre lo que hicimos o no hicimos por la persona que ha fallecido. Pensamientos como "¿Pude haber hecho más?" o "¿Por qué no pasé más tiempo con ellos?" suelen invadir la mente de quienes están de luto.


Soledad

La soledad es una emoción intensa durante el Duelo. La ausencia de la persona querida puede generar una sensación de vacío que es difícil de llenar. A menudo, esta soledad lleva al aislamiento social.

 

Shock

El impacto de la pérdida a veces resulta en un estado de shock, especialmente cuando la muerte ocurre de manera inesperada. El shock es una respuesta emocional automática que puede bloquear el dolor temporalmente.


Cambios en las conductas de una persona en Suelo

El Duelo no solo afecta nuestras emociones; también puede generar cambios profundos en nuestras conductas. Estos cambios pueden variar de una persona a otra, pero algunos de los más comunes son:

 

  • Aislamiento social: muchas personas en Duelo tienden a aislarse. Prefieren no interactuar con otras personas ni participar en actividades sociales, optando por quedarse en casa y apartarse del mundo
  • Cambios en la rutina diaria: el Duelo puede hacer que la persona deje de hacer las actividades que solía disfrutar, como ir al gimnasio, salir con amigos o leer. Incluso acciones básicas, como levantarse, bañarse o comer, pueden volverse difíciles.
  • Visitas frecuentes al lugar de descanso del ser querido: algunas personas encuentran consuelo en visitar regularmente el lugar donde su ser querido está descansando, ya sea una tumba o un memorial. Estas visitas pueden ser una forma de mantener un vínculo emocional con la persona fallecida
  • Hablar continuamente de la pérdida: es común que las personas en Duelo hablen con frecuencia de su ser querido o de la experiencia de la pérdida. Este es un mecanismo para procesar el dolor y la realidad de la ausencia

 

Cómo afrontar el Duelo de manera saludable

El Duelo es un proceso personal y único, pero existen recomendaciones generales que pueden ayudar a sobrellevarlo de una manera más saludable, como:

 

Permitir que las emociones fluyan

Es fundamental permitirte sentir y expresar tus emociones. Llorar, sentir tristeza o ira es parte natural del Duelo. Reprimir estas emociones solo puede complicar el proceso y hacer más difícil la sanación. Si sientes ganas de llorar, permítete hacerlo; si necesitas expresar tu enojo, hazlo de forma constructiva, por ejemplo, haciendo ejercicio.


Buscar apoyo social

No te aísles. Rodéate de personas que te brinden apoyo, ya sean amigos, familiares o compañeros de trabajo. Compartir tus sentimientos y recuerdos con otros puede ser una fuente de consuelo.

 

Cuidar tu salud física

El Duelo también afecta la salud física, por lo que es importante mantener hábitos saludables como realizar ejercicio, alimentarte bien y dormir lo suficiente.

 

Expresar lo que sientes

Expresar tus emociones de manera creativa, como escribir una carta, dibujar o realizar cualquier otra actividad artística, puede ayudarte a procesar el dolor.

 

Permitir el recuerdo

No te prives de recordar a la persona que has perdido. Recordar los momentos vividos con esa persona es una forma de mantener su memoria viva y puede ser un paso crucial en el proceso de sanación.

 

Buscar ayuda profesional

Si sientes que el Duelo te está superando o que no puedes gestionar las emociones por ti mismo, es importante buscar ayuda profesional en Psicología. La Terapia Psicológica, como la Psicoterapia Transpersonal o el EMDR, puede ser de gran ayuda en estos casos.

 

El Duelo en niños: ¿Cómo lo experimentan?

Los niños también pueden experimentar el Duelo, aunque de manera diferente. Antes de los 7 años, un niño puede no entender completamente el concepto de muerte, y puede pensar que la persona va a regresar.


A partir de esa edad, es recomendable hablar con los niños con la verdad, explicándoles que la persona fallecida ya no va a volver. Es importante permitirles expresar sus emociones y no subestimar su capacidad para comprender y procesar el Duelo.

 

El Duelo es un proceso emocional complejo que afecta a cada persona de manera diferente, pero afrontarlas de manera saludable es esencial para avanzar. Permítete sentir, busca apoyo y no dudes en pedir ayuda profesional si lo necesitas.

Psicología en Cuauhtémoc