El camino hacia la sanación: ¿Cuándo comenzar terapia después de una infidelidad?

La decisión de acudir a terapia después de una infidelidad es muy personal y depende de varios factores, hay ciertas señales que pueden indicar que buscar ayuda profesional sería beneficioso.

¿Qué tipo de terapia es más efectiva para tratar la infidelidad?

Desde una perspectiva Psicoanalítica, la infidelidad se aborda explorando las dinámicas inconscientes que influyen en el comportamiento de cada miembro de la pareja. Este enfoque busca comprender las motivaciones subyacentes, los conflictos internos y los patrones relacionales que pueden haber llevado a la infidelidad.

La Terapia Psicodinámica puede ser especialmente útil para aquellos que desean explorar en profundidad las razones emocionales y psicológicas detrás de la infidelidad y cómo estas se conectan con su historia de vida.

Recuperación de la confianza después de una infidelidad sin intervención profesional

Es posible que algunas parejas logren recuperarse de una infidelidad sin intervención profesional, pero este proceso tiende a ser más desafiante. La capacidad para superar una infidelidad sin ayuda dependerá de varios factores, como la calidad de la comunicación en la pareja, la disposición de ambos a trabajar en la relación y la gravedad del daño emocional.

A continuación, se exploran los casos en los que puede ser posible la recuperación sin terapia profesional, así como aquellos en los que se recomienda buscar ayuda profesional. Situaciones en las que la recuperación podría ser posible sin intervención profesional:

Compromiso mutuo fuerte

Si ambos miembros de la pareja están profundamente comprometidos a trabajar juntos para superar la infidelidad y tienen una base sólida de amor y respeto mutuo, puede ser posible reconstruir la confianza sin la intervención de un Terapeuta. La disposición para asumir la responsabilidad y hacer cambios es clave en este proceso.

Habilidades efectivas de comunicación

Las parejas que ya tienen habilidades de comunicación madura y abierta, y que son capaces de hablar de manera honesta sin caer en patrones de ataque o defensa, pueden tener mayores probabilidades de gestionar la crisis por sí solas. Esto incluye la capacidad de expresar el dolor y el arrepentimiento de manera respetuosa y escuchar al otro sin interrumpir o juzgar.

Infidelidad como un evento aislado

Si la infidelidad fue un evento aislado y no está vinculada a patrones repetidos de engaño, puede haber mayor oportunidad de recuperación sin ayuda externa, especialmente si la persona que fue infiel muestra un arrepentimiento genuino y está dispuesta a hacer los cambios necesarios para evitar futuros problemas.

Relación previa sólida

Si la relación era sólida antes de la infidelidad y había altos niveles de confianza y respeto, es más probable que la pareja tenga las herramientas emocionales y psicológicas para superar la crisis. En estos casos, la infidelidad puede verse como un evento que, aunque doloroso, no necesariamente refleja un patrón disfuncional subyacente.

Capacidad de perdón y reconciliación

En algunas parejas, uno o ambos miembros pueden tener una mayor capacidad para el perdón y la reconciliación sin la necesidad de ayuda profesional. Esto depende de sus valores, creencias y disposición emocional para dejar atrás el pasado y trabajar hacia un futuro común.

Principales recomendaciones para una pareja que busca sanar después de una infidelidad

Sanar después de una infidelidad es un proceso que requiere tiempo, compromiso y esfuerzo por parte de ambos miembros de la pareja. A continuación, se presentan las principales recomendaciones para una pareja que busca reconstruir la confianza y avanzar hacia la sanación:

• Asumir responsabilidad plena: la persona que fue infiel debe asumir total responsabilidad por sus acciones, sin justificar ni minimizar lo sucedido.
• Establecer una comunicación abierta y honesta: la transparencia es clave. Es importante que la pareja pueda hablar abierta y honestamente sobre la infidelidad, sin ocultar detalles importantes
• Permitir la expresión de las emociones: la parte que fue traicionada debe tener el espacio para expresar su dolor, enojo y confusión sin ser invalidada. Al mismo tiempo, la persona que fue infiel también necesita poder procesar sus propias emociones
• Restaurar la confianza de manera gradual: la confianza no se restablece de inmediato. La parte que cometió la infidelidad debe estar dispuesta a demostrar, con acciones concretas, que es digna de confianza
• Tener paciencia con el proceso de sanación: la sanación emocional es un proceso lento que no debe apresurarse. Es importante que ambos comprendan que puede tomar meses o incluso años para superar completamente la infidelidad
• Evitar la búsqueda de culpables externos: es común que la parte infiel intente justificar su comportamiento por factores externos, como problemas en la relación, estrés laboral, o la tentación de terceros
• Reconstruir la intimidad emocional y física: la intimidad emocional y física probablemente se verá afectada por la infidelidad. Ambos miembros de la pareja deben estar dispuestos a trabajar en su conexión emocional
• Buscar terapia de pareja (si es necesario): en muchos casos, puede ser útil o incluso necesario acudir a un Terapeuta de pareja que pueda guiar el proceso de sanación. La terapia proporciona un espacio seguro para trabajar en temas difíciles y brinda herramientas para reconstruir la relación
• Identificar y resolver problemas subyacentes: la infidelidad a menudo refleja problemas preexistentes en la relación, como falta de comunicación, desconexión emocional, problemas de poder o insatisfacción sexual
• Establecer nuevos límites y acuerdos: después de una infidelidad, la pareja necesita renegociar los límites y los acuerdos sobre lo que consideran comportamiento aceptable e inaceptable en su relación
• Trabajar en el perdón genuino: el perdón es un paso crucial, pero debe ser un proceso auténtico, no forzado. Para que sea posible, ambas partes deben trabajar en entender el daño causado y estar comprometidas a evitar .comportamientos similares en el futuro
• Fomentar el crecimiento personal y de la relación: la infidelidad puede ser una oportunidad para crecer como individuos y como pareja. Es importante reflexionar sobre lo que ambos pueden aprender de la experiencia y cómo pueden mejorar su relación
• Establecer rutinas de cuidado mutuo: a medida que la pareja avanza en su proceso de sanación, es útil incorporar rutinas de cuidado mutuo, como pasar tiempo de calidad juntos, practicar la gratitud diaria, o mantener conversaciones sobre el estado de la relación
• Tener flexibilidad para revaluar la relación: no todas las parejas logran superar una infidelidad, y está bien que, durante el proceso de sanación, se reevalúe si ambos están dispuestos a seguir juntos