Enfermedad de Parkinson
La EP es un síndrome clínico por el envejecimiento prematuro de las neuronas de la pars compacta de la sustancia nigra del mesencéfalo, cuya función es la producción de dopamina. La disminución de este químico es el responsable del cuadro clínico de la enfermedad. La causa de la EP se desconoce, pero en la actualidad se considera que se debe a múltiples factores.
Dr. Jacobo Lester Nosnik
En 1817, el médico inglés James Parkinson publicó el artículo que denominó “Ensayo sobre la parálisis agitante”, donde describió muchos de los síntomas del padecimiento que hoy lleva su nombre.
En este texto, definió este padecimiento como una serie “movimientos temblorosos involuntarios con disminución en la fuerza muscular en zonas que no están en actividad e incluso cuando se les ayuda, propensión a inclinar el tronco hacia delante y a pasar de la marcha a la carrera, mientras que los sentidos y el intelecto permanecen inalterados”, concepto que, en lo físico, es muy preciso hasta la actualidad pero con modificaciones en los aspectos cognitivos.
La EP es un síndrome clínico por el envejecimiento prematuro de las neuronas de la pars compacta de la sustancia nigra del mesencéfalo, cuya función es la producción de dopamina. La disminución de este químico es el responsable del cuadro clínico de la enfermedad.
Una de las enfermedades más frecuentes
La EP es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente después de la enfermedad de Alzheimer y es la única que tiene un tratamiento de restitución, como lo es la dopamina. Su prevalencia es de 329 por cada 100,000 personas. Se presenta de igual manera en hombres como en mujeres.
Causas de la Enfermedad de Parkinson
La causa de la EP se desconoce, pero en la actualidad se considera que se debe a múltiples factores.
Síntomas
1.- Temblor de reposo. Es la principal manifestación neurológica evidente para los pacientes. Comienza en una mano o pie, progresa al miembro en que inició, y el tiempo antes de volverse bilateral, es variable. Disminuye con los movimientos voluntarios, se incrementa con cambios emocionales, como estrés y depresión. Cede al dormir y responde bien a los medicamentos dopaminérgicos.
2. Bradicinesia. Se refiere a la lentitud en la velocidad de movimiento. Es una de las mayores causas de discapacidad de la enfermedad.
3. Rigidez. Es la resistencia a la extensión ante el movimiento pasivo de las articulaciones. Se describe como en “rueda dentada”, que a la palpación se percibe como un “engranaje”.
4. Alteración postural. Aunque para algunos autores no es manifestación mayor; es uno de los hallazgos más preocupantes de la EP por la posibilidad de caídas y heridas. Las caídas se presentan de manera característica hacia atrás, “como una estatua”.
Existen muchos otros síntomas, entre los cuales cabe mencionar la hipofonía, que se refiere a la disminución en el tono de la voz, menos expresión en los músculos faciales o hipomimia facial, tendencia a inclinar el tronco hacia delante y, la “marcha propulsiva o festinante”, que es con pasos cortos y los pacientes la describen “como si tuvieran un motor o a una persona que los empujara al caminar, por lo que se les dificulta frenar por sí solos cuando caminan”.
Parkinson contra Parkinsonismos
La EP debe diferenciarse de los parkinsonismos, que son un grupo amplio de padecimientos que comparten algunos elementos con la EP, pero no son Parkinson. En ese sentido, debemos sospechar de que se trata de un parkinsonismo cuando el cuadro clínico se presenta con caídas, cuando el inicio simétrico, cuando la progresión es rápida, en ausencia de temblor desde el inicio, con un cuadro clínico con predominio de disautonomías y cuando la respuesta al tratamiento dopaminérgico es baja (< 70%).
En la EP también existen síntomas no motores, que pueden afectar la calidad de vida de los pacientes y de sus familias, por lo que se necesita de su pronta identificación para poder establecer un tratamiento adecuado. Se dividen en varios grupos:
1. Síntomas neurosiquiátricos. Fatiga crónica, depresión, ansiedad, ataques de pánico, síndrome confusional, alucinaciones, alteraciones cognitivas y cuadros demenciales mixtos.
2. Trastornos del sueño. Insomnio para conciliar el sueño, fragmentación del sueño, somnolencia diurna, trastorno conductual del sueño REM, apnea obstructiva del sueño, síndrome de piernas inquietas y movimientos periódicos de miembros inferiores.
3. Síntomas disautonómicos. Estreñimiento, hipotensión ortostática, sudoración excesiva, disfunción urinaria y disfunción sexual.
4. Síntomas sensoriales. Hiposmia, dolor inexplicable en distintas partes del cuerpo, como articulaciones (más en los hombros) y trastornos visuales.
Todos ellos pueden o no presentarse en el transcurso del tiempo y en porcentajes variables.
La EP es un padecimiento heterogéneo. El diagnóstico temprano tiene la intención de establecer algunas posibilidades de tratamiento que permitan mejorar la calidad de vida de las personas que la padecen.