Enfermedades en los párpados
Enfermedades Palpebrales
Una Enfermedad Palpebral puede producir Visión Borrosa. Es decir, para poder ver nítidamente los párpados deben estar posicionados correctamente, permitiendo proteger el globo ocular y, al mismo tiempo, posibilitando que la lágrima y sus componentes se distribuyan de forma apropiada sobre la superficie del ojo.
Cuando un párpado superior está excesivamente caído (lo que conocemos como Ptosis Palpebral), impedirá parcial o totalmente la visión de la mitad superior del campo visual. Otro ilustrativo ejemplo lo podemos observar en aquellos pacientes que no pueden parpadear por completo (lo que conocemos como Lagoftalmos), de modo que se reseca su superficie ocular produciéndose heridas que provocan Visión Borrosa. Por último, en aquellos párpados con tumoraciones considerables, éstas pueden alterar la curvatura de la córnea y desarrollar un Astigmatismo que pudiera empeorar la agudeza visual del paciente.
Ojo Lloroso
Aunque cada caso debe individualizase y debe ser explorado por un Oftalmólogo especialista en Enfermedades de los Párpados y de la Vía Lagrimal (especialista en Cirugía Oculoplástica), efectivamente los párpados son fundamentales para conseguir que los ojos no lloren excesivamente. Deben tener una tensión y posición apropiada para poder cumplir con su función de distribución de la lágrima sobre la superficie ocular y potenciar su drenaje hacia la vía lagrimal. Un párpado fláccido o un párpado que no esté bien posicionado sobre el ojo provocará muy probablemente un Ojo Lloroso.