Estreñimiento en niños: Señales de alerta y cuándo consultar al médico
El estreñimiento infantil es una afección común que afecta a numerosos niños, con una prevalencia significativa en la población general.
Esta condición recurrente afecta hasta un 29.6% de la población general y es una de las principales causas de consultas en pediatría, ya que, tres de cada diez lactantes padecen estreñimiento de forma recurrente. El estreñimiento se caracteriza por dificultades para evacuar las heces, lo que puede provocar malestar, dolor y frustración tanto en los niños como en los padres.
¿Qué es el Estreñimiento?
El Estreñimiento es un trastorno que altera la frecuencia, el tamaño y la consistencia de las deposiciones. En los lactantes, puede manifestarse desde el nacimiento y hasta cualquier edad.
Es importante estar atentos a los patrones de evacuación de los pequeños, ya que cada niño es único y puede presentar variaciones en la frecuencia y regularidad de sus deposiciones.
Señales de alerta
Reconocer los síntomas del estreñimiento es fundamental para abordar esta condición de manera oportuna. Algunas señales comunes son:
- Deposiciones duras, secas y difíciles de eliminar, a menudo en forma de bolas
- Llanto, dolor y malestar durante la defecación
- Manchas de sangre en la ropa interior o el pañal
- Abdomen hinchado o distendido
- Deposiciones con menos frecuencia (menos de 3 veces por semana)
- Posturas extrañas o evasivas al intentar evacuar
Otros síntomas relacionados con el estreñimiento son los trastornos miccionales o la alteración en el patrón de defecación, los cambios en el aspecto de la deposición, las estrías sangrantes, las alteraciones en tono del esfínter anal o las malformaciones.
Si estos síntomas persisten durante más de dos semanas o se acompañan de vómitos, pérdida de peso, dolor abdominal intenso o sangrado rectal, es importante buscar atención médica de inmediato.
Causas principales del estreñimiento en niños
El Estreñimiento infantil puede tener diversas causas, tanto primarias como secundarias. Algunas de las más comunes son:
Causas primarias (95% de los casos)
- Dieta inadecuada: El consumo excesivo de bebidas azucaradas, alimentos refinados, lácteos y golosinas puede contribuir al estreñimiento al dificultar el tránsito intestinal
- Falta de actividad física: Mantener a los niños en una sola posición, sin permitirles gatear o jugar, puede reducir la motilidad intestinal
- Hábitos de defecación inadecuados: Evitar o retrasar la ida al baño, especialmente al ingresar a la escuela, puede generar problemas
Causas secundarias (5-10% de los casos)
- Condiciones médicas: Epilepsia, Síndrome de Down, Diabetes, Parálisis cerebral, tumores cerebrales o malformaciones ano-rectales pueden estar relacionadas con el estreñimiento
- Medicamentos: Algunos fármacos, como el hierro en exceso, pueden causar estreñimiento como efecto secundario
- Deshidratación: La falta de ingesta adecuada de líquidos puede dificultar el tránsito intestinal
Prevención y tratamiento
Abordar el estreñimiento infantil requiere un enfoque integral que combine una alimentación adecuada, hábitos saludables y, en algunos casos, intervenciones médicas.
El tratamiento dependerá de la edad y del tiempo que padezcan la enfermedad. En el caso de los bebés, el estreñimiento puede ser transitorio, por lo que se les receta laxantes para que puedan evacuar.
En algunos casos, el estreñimiento puede requerir intervención médica. Los tratamientos pueden incluir:
- Microenema
- Supositorios
- Laxantes o suplementos de fibra, según lo indicado por el pediatra
- Terapias de desimpactación para casos crónicos o severos
- Fisioterapia pélvica o estimulación del nervio sacro en casos específicos
Es importante seguir las recomendaciones del profesional médico y no administrar tratamientos sin supervisión. Asimismo, se desaconseja dar fibra al bebé (hasta los seis meses se recomienda lactancia en exclusiva) o suplementos de esta a los menores de cuatro años.
La importancia de una alimentación saludable
Una dieta rica en fibra, frutas, verduras y líquidos es clave para prevenir y aliviar el estreñimiento en niños. Algunos alimentos recomendados son:
- Frutas enteras con piel (naranjas, ciruelas, kiwis)
- Yogurt y productos lácteos probióticos
- Cereales integrales y granos enteros
- Agua y jugos naturales sin azúcar
Además, es importante limitar el consumo de alimentos procesados, azúcares refinados, lácteos grasos y bebidas azucaradas.
Hábitos saludables
Además de una alimentación adecuada, es esencial fomentar hábitos saludables en los niños:
- Promover la actividad física regular, acorde a la edad y capacidades del niño
- Establecer horarios regulares para las comidas y el uso del baño
- Crear un ambiente relajado y sin presiones durante la defecación
- Mantener una hidratación adecuada, especialmente en climas cálidos
¿Cuándo hay que visitar al especialista por estreñimiento infantil?
Cuando los síntomas perduran más de dos semanas y su situación no mejora con la dieta o el tratamiento que se le está dando se debe acudir al pediatra. También si el pequeño vomita, está perdiendo peso, se queja de mucho dolor en el abdomen, si se siente hinchado o cuando existe un sangrado del recto.
El estreñimiento infantil es un problema común que puede causar malestar y preocupación en los niños y sus familias. Sin embargo, con una comprensión adecuada de las causas, síntomas y estrategias efectivas, es posible prevenir y abordar esta condición de manera exitosa.
Al fomentar una alimentación saludable, hábitos adecuados y, cuando sea necesario, buscar atención médica oportuna, los padres pueden ayudar a sus hijos a superar el estreñimiento y disfrutar de una salud intestinal óptima.