Extrasístoles ventriculares: ¿Un signo de enfermedad cardíaca grave?
Una extrasístole ventricular es un latido anormal que se origina en la parte baja del corazón (los ventrículos) sin seguir el ritmo normal del corazón, por lo tanto, es una arritmia ventricular.
Un latido normal inicia en la parte más alta del corazón y posteriormente baja por el sistema normal de conducción por la aurícula, hasta llegar a los ventrículos.
Causas y síntomas
Las Extrasístoles Ventriculares suelen presentarse más comúnmente en pacientes que toman café, alcohol, tienen desvelos o alguna infección en el cuerpo. Existen dos tipos principales de extrasístoles:
- Extrasístoles benignas: Aparecen en la juventud, sin relacionarse con alguna anomalía cardiaca.
- Extrasístoles malignas: Se asocian comúnmente con enfermedades del corazón y son secundarias a daño en el músculo cardiaco.
Los pacientes acuden a consulta ante la presencia de palpitaciones en el pecho, algunos otros síntomas pueden ser falta de aire, fatiga o desmayos.
Diferencias entre extrasístole ventricular y otras arritmias cardíacas
A diferencia de las Arritmias, las Extrasístoles Ventriculares se caracterizan por romper con el ritmo normal del corazón, pueden ser sencillas o con mayor frecuencia (bigeminismo o trigeminismo).
Asimismo, aparecen en la gran mayoría de las personas en una cantidad baja 2-100 latidos al día, pero si hay una mayor cantidad de extrasístoles pueden tener repercusiones en el futuro.
Diagnóstico y tratamiento de la Extrasístole Ventricular
El primer paso para detectar la presencia de una extrasístole ventricular es realizar un Electrocardiograma y un Holter de 24 horas, sin embargo, también pueden ser necesarios otros estudios complementarios, como Ecocardiograma o Prueba de Esfuerzo, para poder llegar al origen de la arritmia.
Una vez diagnosticado el tipo de arritmia, se puede tratar con medicamentos antiarrítmicos o un procedimiento llamado ablación. La ablación es el tratamiento definitivo y se hace vía cateterismo para llegar al corazón y eliminar el tejido responsable de producir la arritmia.
Cuando las extrasístoles son benignas, generalmente se opta por la ablación por tener buenos resultados y evitar el uso crónico de antiarrítmicos. Mientras que, si las extrasístoles son secundarias a otro problema cardiaco (ejemplo un infarto), el pronóstico depende de las secuelas del infarto.
Se recomienda evitar el ejercicio en lo que se tiene una valoración por el especialista (cardiólogo-electrofisiólogo), dado que algunas de estas arritmias pueden incrementar con el ejercicio.