Fractura de Pierna: Lesiones que requieren una rehabilitación completa
Las Fracturas son todas aquellas lesiones que rompen parcial o totalmente un hueso. Estas afecciones pueden variar en gravedad y tipo.
La recuperación de una Fractura de Pierna requiere de una combinación de tratamiento médico con Fisioterapia para garantizar la curación completa que implica recuperar la movilidad y la fuerza de la extremidad.
Tipos de Fracturas de Pierna
Las Fracturas de Pierna pueden clasificarse según su naturaleza o gravedad, por ejemplo:
- Fractura Abierta: En este tipo de Fractura, el hueso rompe la piel. Se trata de una lesión que tiene alto riesgo de infección y por lo general, requiere de una intervención quirúrgica inmediata
- Fractura Cerrada: El hueso se rompe, pero la piel permanece intacta. Es una lesión menos complicada y con un menor riesgo de infección
- Fractura Conminuta: En este tipo el hueso se rompe en varios fragmentos. Se trata de una Fractura grave que requiere una atención médica de urgencia para reparar los fragmentos óseos
- Fractura Transversal: El hueso se rompe en una línea recta horizontal. Esta lesión es generalmente causada por un impacto directo
- Fractura Oblicua: La ruptura del hueso tiene una línea inclinada. Este tipo suele ser el resultado de una fuerza indirecta aplicada en un ángulo específico
- Fractura Espiral: El hueso se rompe en un patrón de espiral
¿Cómo se produce cada tipo de Fractura?
Existen diversas actividades que se consideran de alto riesgo para el desarrollo de Fracturas. Algunas de las más comunes incluyen:
- Accidentes de tránsito
- Caídas
- Lesiones Deportivas
- Traumas
Tratamiento de una Fractura de Pierna
Como en todas las lesiones, el tratamiento dependerá de la localización y severidad. En algunos casos, la atención médica es de carácter urgente. Algunas de las opciones de tratamiento incluyen:
- Inmovilización: Se usa en Fracturas no graves, incluye el uso de yesos o férulas para mantener el hueso en una posición correcta mientras sana
- Cirugía: Utilizada en Fracturas graves como las conminutas o abiertas. El objetivo de este procedimiento es alinear y estabilizar los huesos rotos
- Tracción: Técnica empleada para alinear los huesos antes de una intervención quirúrgica o inmovilización definitiva
Uno de los procedimientos quirúrgicos más comunes es la Reducción Abierta y Fijación Interna (RAFI). Esta técnica implica una incisión para alinear los huesos rotos y la colocación de dispositivos internos como placas, tornillos o varillas.
Manejo del Dolor y prevención de complicaciones
El manejo del dolor es un factor crucial en la recuperación tras una Fractura de Pierna. Para ello, se puede indicar el consumo de medicamentos, la aplicación de terapias frío/calor y algunas técnicas de relajación. Por otro lado, la prevención de complicaciones principalmente quirúrgicas, como infecciones, sangrado o pérdida de masa muscular, también se considera un elemento de gran importancia para garantizar una recuperación total.
El proceso de recuperación después de una Fractura de Pierna es variable según la gravedad de la lesión y el tratamiento indicado. Durante las primeras semanas o meses, es probable que la persona especialista recomiende reposo durante semanas o meses para limitar el movimiento. Posteriormente, se iniciará un proceso de rehabilitación que incluya Fisioterapia para recuperar la movilidad y la fuerza muscular.
El retorno a las actividades cotidianas se medirá con base en los resultados del proceso de recuperación. Algunas tareas cotidianas no implican ningún riesgo para la persona, pero otras, como realizar ejercicio de alto impacto, pueden comprometer la rehabilitación de la Fractura. Por ello, es sumamente importante llevar todo el proceso con una persona especialista, desde la lesión hasta la recuperación completa.
En este proceso, la persona puede hacer uso de auxiliares de la marcha, como bastones, muletas o andadores, para garantizar una estabilidad y soporte necesario.
La Fisioterapia y su papel en la recuperación
La Fisioterapia es un elemento crucial para restaurar la funcionalidad de la pierna después de una Fractura. Los ejercicios están orientados al fortalecimiento muscular, entrenamiento del equilibrio y generar conciencia sobre la movilidad de la extremidad.
Consejos para una recuperación exitosa
Es importante que, además de las indicaciones médicas, se tomen algunos hábitos que contribuyan a la recuperación de la funcionalidad de la extremidad. Estas recomendaciones incluyen:
- Descanso
- Dieta equilibrada rica en calcio y vitamina D
- Soporte emocional
Ejercicios para fortalecer la pierna
En cada etapa de la recuperación se recomiendan ejercicios específicos que tienen el objetivo de garantizar una recuperación completa de la movilidad de la pierna. Inicialmente, se recomienda empezar con ejercicios suaves para mantener la movilidad articular.
Una vez que se obtiene el rango de movimiento, se procede con ejercicios de resistencia para recuperar la fuerza muscular de manera progresiva. Finalmente, se recomiendan ejercicios de equilibrio para mejorar la coordinación y prevenir Fracturas futuras.
Es fundamental aumentar la intensidad y complejidad de los ejercicios de forma gradual para evitar recaídas o nuevas lesiones. Además, es necesario realizar estas actividades con un apoyo multidisciplinario que incluya a personas especialistas en Ortopedia y Traumatología, así como en Fisioterapia.