Glaucoma: Enfermedad ocular silenciosa (Parte 1)

Glaucoma: Enfermedad ocular silenciosa (Parte 1)

Editado por: el 28/02/2020

El glaucoma es la segunda causa de ceguera en el mundo, la mitad de las personas con pérdida de la visión debido al glaucoma, no se enteran hasta sufrir esta consecuencia.

 

 

¿Qué es?

 

Es un padecimiento ocular caracterizado por un daño paulatino y progresivo del nervio óptico, el cual, de no ser detectado y tratado oportunamente, trae por consecuencia la pérdida irreversible del campo visual. Esto puede estar muy relacionado con un aumento en la presión intraocular. Sin embargo, la presencia de una presión intraocular normal no descarta el diagnóstico de glaucoma; ya que en la génesis de este padecimiento pueden estar involucrados otros mecanismos de daño tan importantes como la misma presión intraocular.

 

Tipos de Glaucoma

 

  • GLAUCOMA CRÓNICO DE ÁNGULO ABIERTO: Es la forma más común de glaucoma, su evolución es lenta y progresiva. Por lo general es asintomático hasta etapas tardías del padecimiento. Su diagnóstico puede ser hecho en una exploración oftalmológica de rutina al encontrar signos y síntomas propios del padecimiento que el paciente posiblemente no se había percatado.

 

  • GLAUCOMA AGUDO DE ÁNGULO ESTRECHO: Es una forma menos frecuente, en la cual la presión intraocular se eleva rápidamente debido a un bloqueo súbito de la vía normal de drenaje del humor acuoso. Por lo general cursa con inflamación ocular, baja súbita de la visión y dolor ocular muy intenso que no mejora con analgésicos habituales. Se le considera una urgencia ocular y de no tratarse de manera inmediata, se corre el riesgo de pérdida visual irreversible por daño a las fibras que constituyen el nervio óptico.

 

  • GLAUCOMA PSEUDOEXFOLIATIVO: En este tipo de glaucoma, un material de aspecto blanco-grisáceo se deposita sobre el cristalino, iris y malla trabecular (sitio de drenaje) obstruyendo la salida del humor acuoso y con ello elevando la presión intraocular.

 

  • GLAUCOMA CONGÉNITO: Es una condición muy poco frecuente (1 de cada 10,000 recién nacidos) en la cual existe una alteración en la formación del ángulo de la cámara anterior del ojo (sitio de drenaje del humor acuoso) que genera elevación de la presión intraocular, la cual incide en las paredes mismas del ojo, adelgazándolas y de esta manera aumentando las dimensiones del mismo (buftalmos), así como infiltrando con líquido la estructura de la córnea (edema corneal). El bebé se presenta con lagrimeo, fotofobia (molestia con la luz), blefaroespasmo (que causa dificultad para abrir los párpados), córneas de tonalidad gris por el edema y aumento en las dimensiones del ojo. Su diagnóstico y tratamiento oportuno son muy importantes dada la trascendencia para el futuro visual del paciente.

 

  • GLAUCOMA SECUNDARIO: Este es debido a una causa conocida que puede generar el padecimiento. Tanto el glaucoma de ángulo abierto como de ángulo cerrado pueden ser secundarios. Algunas de las causas más frecuentes pueden ser: 

                     - Uveítis (inflamación de las capas medias del ojo).

                     - Uso crónico de esteroides.

                     - Diabetes Mellitus.

                     - rauma o cirugía ocular previa.

 

Su manejo dependerá de la causa que generó el glaucoma, en conjunto con el padecimiento de fondo.

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