Halitosis: cómo enfocarla y tratarla
La Halitosis, también conocida como mal aliento, es un trastorno muy frecuente que afecta al 25% de la población
En ocasiones, la Halitosis es causada por enfermedades de la cavidad oral o por una higiene bucal deficiente. En otras, su origen puede deberse a Trastornos del Aparato Digestivo (Gastritis), Enfermedades Hepáticas, renales, Tabaquismo o Alcoholismo.
Finalmente, en un grupo no despreciable de pacientes, la causa radica en las amígdalas. Esto es debido a que hay amígdalas que presentan en su superficie unos pequeños agujeros o cavidades, llamados criptas. En dichas criptas, se depositarán restos de comida, que debido a la acción de las bacterias de la boca, se degradarán y transformarán en un material blanco, que denominaremos caseum y que emitirá unas sustancias malolientes.
¿Cómo se diagnostica?
En ocasiones el paciente no detecta su propio mal aliento. Lo más usual es que acuda a la consulta, preocupado porque las personas con las que se relaciona le han referido que tiene aliento desagrable. En todos los casos, el primer paso será la exploración de la boca (dientes, encías, lengua y amígdalas).
A continuación, se realiza en la misma consulta una sencilla, rápida e indolora Endoscopia, para visualizar la nariz, la cavidad oral y la garganta, buscando el foco causante del problema.
Tratamiento
La solución al mal aliento depende de la causa. Si ésta consiste en un problema dental (Caries, Inflamación de las Encías, etc.), el Odontólogo será el encargado de resolverlo. Si por el contrario, el foco está localizado en las amígdalas, el tratamiento consiste en eliminar las placas blanquecinas (caseum), así como las criptas o pequeñas cavidades donde se alojan.
En el último caso, se ha desarrollado una técnica innovadora que consiste en eliminar con láser todas las capas superficiales de las amígdalas, es decir, las áreas donde se hallan las criptas y el caseum que contienen. Se trata de una intervención rápida, indolora, y sin sangrado. Además el paciente podrá abandonar la clínica a las pocas horas, sin malestar y restableciendo su actividad normal al día siguiente.