Hiperparatiroidismo: hiperactividad de las glándulas paratiroides
El hiperparatiroidismo es una enfermedad en la que la se produce una secreción excesiva de hormona paratiroidea, existen 3 tipos y varias opciones de tratamiento dependiendo el tipo. Esta enfermedad se puede detectar de forma temprana con una prueba sencilla de calcio en sangre.
Síntomas del hiperparatiroidismo
El hiperparatiroidismo es una enfermedad que se caracteriza por la hiperactividad de una o más glándulas paratiroides, esto resulta en una secreción excesiva de la hormona paratiroidea (PTH) que a su vez condiciona un incremento en los niveles de calcio en la sangre por arriba del límite normal, ante los más pequeños síntomas es necesario acudir con un endocrinólogo para su diagnóstico adecuado.
En la mayoría de los casos no se presentan síntomas específicos de la enfermedad (es una enfermedad silenciosa), o se presentan síntomas muy vagos que pueden no llevar al diagnóstico. Cuando se llegan a presentar, los síntomas más comunes son los siguientes: fatiga, irritabilidad, dificultad para concentrarse, pérdida de la memoria, ánimo deprimido, dolor en huesos, dolor de abdomen, piedras en los riñones y osteoporosis (esta última se puede manifestar con fracturas). A largo plazo, el hiperparatiroidismo también puede causar insuficiencia renal.
Hiperparatiroidismo primario, secundario y terciario
Existen principalmente 3 tipos:
El hiperparatiroidismo primario es el más común y es el que se presenta de forma espontánea, sin que existan otras enfermedades o condiciones que lo favorezcan. Es más frecuente en mujeres que se encuentran en la quinta o sexta década de la vida. Con frecuencia se encuentra de forma incidental por estudios o un check up.
El hiperparatiroidismo secundario se presenta en pacientes que cuentan con alguna enfermedad o condición que impide la adecuada absorción o utilización del calcio. Tal es el caso de los pacientes con insuficiencia renal o deficiencia severa de vitamina D. La vitamina D es esencial para la absorción y fijación del calcio, la fuente principal de vitamina D es la exposición al sol. En nuestro medio la deficiencia de vitamina D es muy frecuente.
El hiperparatiroidismo terciario es muy raro y se ve en pacientes que padecieron insuficiencia renal e hiperparatiroidismo secundario, y que posteriormente recibieron un trasplante renal por lo que se cura la insuficiencia renal pero persiste el hiperparatiroidismo.
Extirpación de las glándulas paratiroides y otros tratamientos eficaces
El tratamiento ideal y único en el hiperparatiroidismo primario, que es el más frecuente, es la cirugía. Dicho procedimiento consiste en remover quirúrgicamente la o las glándulas afectadas. Es un procedimiento que se puede realizar en forma ambulatoria y con anestesia local en casos seleccionados. Es un tratamiento altamente exitoso con una tasa de curación superior al 95% cuando es realizada por un experto.
La cirugía puede ser dirigida (mínima invasión) o una exploración formal de cuello. El procedimiento más adecuado se selecciona según los resultados de los estudios de localización (gamagrama y ultrasonido). La paratiroidectomia es una cirugía segura con un índice de complicaciones por debajo del 1% si se realiza por un experto.
También existe la opción del tratamiento expectante, que consiste únicamente en observación y seguimiento cuando la enfermedad es asintomática o cuando el paciente no puede ser sometido a una cirugía.
Por último se puede administrar tratamiento médico enfocado a disminuir los niveles del calcio, sin embargo este tratamiento es caro y, aunque puede ser útil para mejorar la sintomatología, no es curativo y algunas de las complicaciones a largo plazo no se previenen.
El hiperparatiroidismo no se puede evitar, sin embargo, sí se puede detectar de forma temprana con una prueba sencilla de calcio en sangre.