Implantes Dentales: una especie de tuerca para atornillar después un diente
Cuando se pierde un diente y lo reemplazamos por un implante, el implante dental en sí mismo es el que sustituye a la raíz del diente.
Los implantes dentales, generalmente, tienen por su parte externa forma de tornillo para poder sujetarse en el hueso donde irán colocados, y una rosca o tuerca por la parte interna; los hay de diversas formas y tamaños, pero casi todos coinciden en ser un aditamento de titanio usado para reemplazar la raíz de los dientes que se han perdido o dañado y donde más tarde se colocará un diente artificial con el mismo aspecto y que deberá cumplir la misma función que los dientes reales.
Tipos de implantes
Existen muchos tipos de implantes; los hay de tornillo, cilíndricos, en laminas. Pero hoy en día, los Implantes Endo-óseos (dentro del hueso) de tornillo son comúnmente los más utilizados. Este tipo de implantes se colocan por medio de una pequeña cirugía en los huesos de la mandíbula y los maxilares, se diferencian en función de su forma de colocación.
- Implantes dentales en dos fases
- Implantes dentales de carga inmediata
La forma más habitual de colocar Implantes dentales es en dos fases; la primera de estas fases consta de la cirugía, la colocación del implante, y un periodo de recuperación de 3 a 6 meses que permite al implante integrarse con el hueso. La segunda fase es la rehabilitación, es decir, todos los pasos necesarios para colocar el diente que ira atornillada a ese implante.
Los implantes dentales de carga inmediata son las dos fases mencionadas anteriormente, al mismo tiempo. La ventaja es que se coloca el implante dental y se fija el diente en el mismo momento; la desventaja es que no todos los procedimientos de implantes se pueden hacer con esta técnica ya que es necesario y de suma importancia que el paciente posea una buena cantidad y calidad de hueso, que en la zona no haya ninguna infección y que existan las condiciones ideales para que funcione.
¿Quién es candidato a un implante?
Todos; cualquier persona que haya perdido alguno de sus dientes es candidato, aunque hay algunas cosas a considerar:
- Ser mayor de 18 años en el caso de las mujeres
- No estar embarazada
- Ser mayor de 21 si eres hombre
- Tener las encías sanas
- Deberá existir suficiente hueso para sostener el implante
¿Son para toda la vida?
ciertamente las ventajas de los implantes es que mejoran la masticación al recuperar los dientes perdidos, mejoran la autoestima de las personas al recuperar la estética, pero mejor aún son prótesis que no dañan o afectan a otros dientes, como ocurre con el uso de otro tipo de prótesis como puentes fijos o aparatos movibles.
En la mayoría de los casos, el implante sí es permanente, y va a durar integrado al hueso mientras el hueso permanezca sano, suponiendo que exista un mantenimiento adecuado cada 6 meses y que el paciente mantenga una buena calidad de higiene, a menudo suelen durar el resto de la vida del paciente. La prótesis atornillada a ese implante, por otro lado, tiene una vida más corta, con una duración aproximada de entre 10 a 15 años, el desgaste o deterioro puede hacer que el diente requiera ser reemplazado utilizando el mismo implante.
En cualquier caso, la vida útil de los implantes dentales puede verse afectada por factores de salud, o enfermedades degenerativas como la Diabetes o el Cáncer, por malos hábitos como morder objetos o fumar, algún golpe fuerte o accidente y la mala higiene aumentan en gran medida la probabilidad de fracaso de un implante dental.
Por último, para evitar complicaciones, fracasos o sorpresas desagradables después del tratamiento de implantes, se debe mantener seguimiento de profesionales altamente calificados.