Insuficiencia Renal: cuando los riñones fallan

Insuficiencia Renal: cuando los riñones fallan

Editado por: Amairani Rua el 19/09/2024

Condición médica en la cual los riñones pierden la capacidad de filtrar adecuadamente la sangre. Esto significa que los desechos y el exceso de líquido no se eliminan del cuerpo de manera efectiva.

 

Insuficiencia Renal ¿Cómo se le conoce?

La Insuficiencia Renal es un padecimiento en el que los riñones dejan de funcionar. La principal función de los riñones se puede resumir en dos aspectos: eliminar líquidos y eliminar tóxicos del cuerpo. Cuando los riñones ya no funcionan, estas dos situaciones se ven afectadas. El paciente no puede eliminar adecuadamente los líquidos ni los tóxicos que se generan en el cuerpo.


Principales causas de la Insuficiencia Renal

Existen muchas causas de Insuficiencia Renal, pero en la población mexicana, la mayoría de los casos se originan por Enfermedades Crónicas, principalmente la Diabetes, la Hipertensión Arterial y otras condiciones que dañan progresivamente el riñón.


Aunque la mayor parte de los casos están relacionados con estas causas, también hay causas genéticas o trastornos en la formación de los riñones, como los Quistes o la Insuficiencia Renal Obstructiva causada por la Hipertrofia Prostática o la presencia de Litos (piedritas) en los riñones.


Síntomas comunes de la Insuficiencia Renal

Al igual que muchas Enfermedades Crónicas, la Insuficiencia Renal es silenciosa. En las primeras etapas puede haber daño renal progresivo sin manifestaciones evidentes. Por eso, es importante realizar chequeos preventivos y practicar la medicina preventiva. Sin embargo, cuando la enfermedad está avanzada, las principales manifestaciones son la retención de líquidos (el paciente empieza a hincharse, especialmente en las piernas y el cuerpo) y la acumulación de tóxicos, lo que provoca síntomas como Náuseas y Dolor Abdominal. En fases más avanzadas, pueden presentarse temblores, sangrados o incluso Convulsiones, lo que indica una intoxicación más severa debido a la enfermedad renal.


¿Cómo se diagnostica la Insuficiencia Renal?

Cuando la Insuficiencia Renal está avanzada, los síntomas revelan que los riñones están fallando. En etapas tempranas, lo ideal es realizar estudios de laboratorio, principalmente mediciones de los niveles de urea y creatinina en sangre. También se utiliza un estudio de orina conocido como depuración de creatinina en orina de 24 horas, en el que el paciente recolecta toda su orina durante un día. Este examen indica en qué porcentaje están funcionando los riñones y permite clasificar la enfermedad renal según su etapa.


Afectación a otros órganos por una Insuficiencia Renal

La Insuficiencia Renal afecta varios aspectos del cuerpo, principalmente el corazón y la circulación sanguínea. Los tóxicos acumulados pueden causar problemas generales, y la retención de líquidos puede llevar a una falla cardíaca por congestión. Los pulmones también pueden verse afectados por la acumulación de líquidos, y la toxicidad de la urea, que es la principal sustancia que se acumula en la Insuficiencia Renal, puede causar daño cerebral, conocido como Encefalopatía. Esto puede llevar al paciente a desvariar, caer en coma o incluso sufrir convulsiones.


Tratamientos disponibles para la Insuficiencia Renal

En las etapas tempranas de la enfermedad, lo ideal es detectarla e iniciar tratamiento con medicamentos que ayuden a frenar el daño renal, evitando que progrese. Aunque no siempre es posible recuperar la función renal perdida, se puede evitar que la enfermedad avance hasta el punto en que se requiera diálisis, un procedimiento en el que una máquina sustituye la función de los riñones al limpiar la sangre y eliminar los líquidos del cuerpo.


El tratamiento debe comenzar por controlar la causa subyacente, como la Diabetes o la Hipertensión, ya que el descontrol de estas enfermedades es lo que genera el daño renal. Si la enfermedad avanza a pesar del tratamiento, el paso siguiente es la Hemodiálisis o Diálisis Peritoneal, ambos métodos utilizados para eliminar los líquidos y tóxicos acumulados en la sangre.

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