La Gingivitis y la Periodontitis: Padecimientos que están muy de la mano
En México existe un alto índice de enfermedad periodontal, gran parte de los pacientes por arriba de los cincuenta llegan a consulta por este motivo.
La Gingivitis es la inflamación de la encía, mientras que la Periodontitis es una consecuencia de una Gingivitis mal cuidada llevando a un estadio crónico. No puede haber Periodontitis si previamente no hubo Gingivitis.
¿Por qué se desarrolla?
La Gingivitis se produce cuando existe un pequeñito surco entre la encía y el diente y en el cual se va acumulando la placa bacteriana, está a su vez va ganando terreno y se va instalando en la zona de la encía llenando de bacterias esta área que conforme va avanzando el tiempo y no se va retirando, se torna cada vez más agresiva.
Al principio de la enfermedad las bacterias acumuladas son aerobias que van evolucionando hasta ser bacterias capaces de sobrevivir sin oxígeno ocasionando que comiencen a migrar hacia la encía provocando inflamación, está enfermedad hasta este punto puede ser reversible, no obstante, no tratarse a tiempo puede derivar en una Periodontitis.
La Periodontitis se presenta cuando la Gingivitis no fue tratada de forma correcta y ha ocasionado que la infección ingrese al diente, en estos casos ya hay una pérdida de hueso y el soporte del mismo, puede llegar a tener incluso movilidad y las encías empiezan a bajar dejando al descubierto la raíz del diente.
¿Cómo no perder mi dentadura?
El mejor tratamiento es la prevención y en los casos que ya se presentan síntomas lo ideal es comenzar con un tratamiento correctivo a través de limpiezas bucales a profundidad con la finalidad de eliminar lo más posible la placa bacteriana. Para los casos de Periodontitis se recurre a un injerto tanto hueso o gingival, en algunos casos puede ser necesario la extracción del diente y la colocación de implantes.