“La reconstrucción mamaria ayuda psicológicamente a la paciente a afrontar el tratamiento oncológico posterior del cáncer de mama”
La Reconstrucción Mamaria se lleva a cabo si se ha tenido que realizar una extirpación de la mama como consecuencia de un Cáncer. Lo mejor es intentar realizar la reconstrucción inmediata para preparar psicológicamente a la paciente
En México, se diagnostican alrededor de unos 24.000 nuevos casos de Cáncer de Mama al año, con una supervivencia superior al 80% gracias a la operación de Mastectomía.
Sin embargo, además de las secuelas físicas que suele dejar (como dolor y una cicatriz), la Mastectomía deja secuelas psicológicas graves en las mujeres que se someten a ella. Culturalmente el pecho es una parte fundamental en el cuerpo de la mujer: contribuye a su feminidad, a su identidad y a su autoimagen. Por lo tanto, perder el pecho es una experiencia muy dura.
Reconstrucción Mamaria como alternativa a la pérdida de mama
Muchas de estas secuelas pueden prevenirse sometiéndose a una Reconstrucción Mamaria. Por esta razón, los especialistas dedicados a realizar este tipo de intervenciones deben tener como parte fundamental del tratamiento dar un aspecto lo más natural al pecho de la mujer que resulte afectado por la enfermedad.
Normalmente, la Reconstrucción Mamaria se lleva a cabo si se ha tenido que realizar una extirpación de la mama como consecuencia de un Cáncer. La Reconstrucción no es incompatible con un Tratamiento Oncológico posterior y evita además que la paciente tenga que verse con la amputación de su seno. Es por esto que, intentamos realizar la reconstrucción inmediata para preparar psicológicamente a la paciente, y así ésta pueda afrontar mucho mejor los tratamientos que puedan conllevar este tipo de patología.
Aunque la reconstrucción no puede perfeccionar lo que es una mama perdida, por lo general, los resultados obtenidos son bastante satisfactorios.
Procedimiento
Hay dos opciones: la primera sería la que se denomina reconstrucción inmediata, es decir, en el momento en que se diagnostica el Cáncer de Mama y se tiene que realizar la Mastectomía, se procede a la reconstrucción en el mismo acto quirúrgico. Este primer tipo, lo podemos realizar con distintas técnicas, una de ellas es la colocación de un expansor –una especie de globo vacío-, que se va rellenando posteriormente con suero fisiológico hasta conseguir un volumen semejante a la mama contralateral.
En algunos casos, se puede proceder después al cambio del expansor por una Prótesis en forma de lágrima, para darle ya una forma definitiva. Otra de las técnicas, es emplear tejidos que se llevan desde otra parte del cuerpo –como espalda o abdomen-.
Si en un primer momento no se pudiera realizar por alguna circunstancia la reconstrucción inmediata, pasados unos meses ésta se podría llevar a cabo, denominándose entonces reconstrucción diferida. Esta segunda opción puede efectuarse también por cualquiera de las técnicas anteriormente expuestas.
Riesgos de la intervención
En principio, los riesgos no son muy elevados, sin olvidar que son intervenciones técnicamente complejas. Las posibles complicaciones que puedan surgir, lógicamente precisarían probablemente una reintervención.
Post-operatorio
Una vez realizada la Mastectomía y la reconstrucción, con carácter general, la paciente está ingresada unas 72 horas aproximadamente en el hospital.
Para la finalización del tratamiento completo, incluyendo la reconstrucción del complejo areola pezón, suele precisar un período entre 3 y 6 meses.