Liposucción: ¿cuándo es una buena opción?
La Liposucción es un procedimiento en el que se extrae la grasa de ciertas zonas del cuerpo para inyectarla en otras y dar mejor forma a la silueta. Por ejemplo, se puede quitar grasa del abdomen para colocarla en los glúteos y/o pantorrillas.
Por disposición genética, todas las personas acumulan grasa en determinadas zonas del cuerpo y, en ocasiones, es muy complicado eliminarla (incluso con dieta y ejercicio). Generalmente, los pacientes optan por una Liposucción porque desean disminuir la grasa localizada en una zona sin afectar otra.
Anteriormente, la Liposucción se llevaba a cabo con cánulas que a presión y fuerza desprendían la grasa del paciente. Dicha técnica significaba desgaste para el cirujano y más trauma postoperatorio para el paciente, así como una mayor pérdida de sangre.
Gracias a los avances en el ramo médico, ahora se pueden utilizar tecnologías como la Liposucción Asistida por Ultrasonido y la Liposucción Asistida con Microiare o PAL (Power-Assisted Liposuction).
La Liposucción Asistida por Ultrasonido es un procedimiento avanzado que utiliza energía ultrasónica suave para romper selectivamente parte de la grasa no deseada, preservando otros tejidos importantes. Sus ventajas son las siguientes:
- Procedimientos más rápidos
- Resultados más efectivos
- Mayor contracción en la piel
- Permite la marcación de todas las áreas
- Menor sangrado
- No obstruye los vasos sanguíneos
- Facilita la transferencia
- Permite tratar todas las áreas
- Mínimas cicatrices
- Recuperación rápida y menos dolorosa
- Mínima inflamación
- Los riesgos de quemaduras cutáneas son menores debido a la utilización del Ultrasonido
- Aparecen menos hematomas.
La Liposucción Asistida con Microaire o PAL (Power-Assisted Liposuction) es el sistema preferido y más utilizado como alternativa a la Liposucción manual, pues conlleva las siguientes ventajas:
- Viabilidad comprobada de las células
- Menos moretones
- Menos inflamación
- Menos fatiga del cirujano
- Procedimiento más rápido
- Preparación para la Liposucción
¿Quién puede realizarse una Liposucción?
Los pacientes que deseen someterse a una Liposucción deben ser valorados por una persona especialista en Cirugía Plástica para determinar si son candidatos. Posteriormente, se realizan exámenes de laboratorio y gabinete (dependiendo de su edad y de su historial médico) para poder evaluar el riesgo que corren ante esta cirugía.
Antes de entrar al quirófano, se deben suspender suplementos y medicamentos no recetados por un médico. Si se toman otros fármacos de manera habitual, es necesario valorar su suspensión antes de la operación.
Cuidados necesarios tras una Liposucción
Los primeros días después de la cirugía, los pacientes deberán ponerse de pie sólo con apoyo de otra persona, ya que hay riesgo de mareos.
En casos de infiltración en región glútea, se recomienda no dormir boca arriba para evitar poner mucha presión en el área donde se inyectó la grasa. No hay contraindicación para sentarse.
El retiro de puntos usualmente se realiza entre los días 7-10 posteriores a la operacón. La dieta es libre, sin embargo, se prefiere que sea balanceada con altas cantidades de verduras y alimentos con hierro.
Es común utilizar fajas postoperatorias, las cuales ayudan a disminuir la inflamación propia de la Liposucción. En los primeros 2-3 días es normal que salga mucho líquido con coloración similar a la sangre por las heridas o por el drenaje; el flujo debe ir disminuyendo con el paso de los días.
Siempre es importante tener comunicación con la persona especializada en Cirugía Plástica ante cualquier duda o eventualidad.