Lo que necesitas saber sobre la Colposcopía: examen, procedimiento y preparación
En algunos consultorios, durante la Colposcopía la paciente puede ver el examen a través de una pantalla que se coloca frente a ella.
La Colposcopía es un estudio que ayuda a detectar y visualizar las lesiones causadas por el Virus del Papiloma Humano (VPH) en el cérvix, cuello de la matriz y en la vagina. Los usos de la Colposcopía son principalmente para tamizaje, lo que significa que se emplea para examinar a todas las pacientes y así ver cuál está en riesgo.
Anteriormente, la indicación era para aquellas con Citologías o resultados de Papanicolau alterados, pero debido a su mayor difusión y beneficios, ahora se usa como tamizaje.
Cómo se realiza
Para realizar una Colposcopía, se utiliza un equipo llamado colposcopio y se coloca a la paciente en posición de litotomía o ginecológica (recostada sobre su espalda con las piernas y rodillas flexionadas). Se introduce una herramienta llamada espejo vaginal para visualizar el cérvix y se aplican ciertos componentes sobre éste. Una vez visualizado, se valora mediante el colposcopio.
Durante el examen, la paciente puede sentir una pequeña incomodidad por la aplicación de los líquidos y del espejo vaginal, así como un pequeño ardor. La mayoría ha mencionado que es un procedimiento incómodo, pero sin llegar a ser molesto.
Preparación
La preparación para una Colposcopía es sencilla. Se recomienda una abstinencia sexual en los tres días previos y es importante que no esté en su periodo menstrual. Es necesario que la Colposcopía sea realizada por un Médico Ginecólogo con el adiestramiento necesario para hacer este tipo de estudios.