Menopausia: un proceso evolutivo que requiere atención especializada
La Menopausia es una etapa de la edad reproductiva de una mujer que oscila alrededor de los 47 y 50 años, y se caracteriza por el cese o la ausencia completa de la menstruación.
Ante la ausencia de la menstruación y durante un año aproximadamente la paciente empezará a presentar una serie de síntomas que se van a manifestar a lo largo de la vida y posterior a esa etapa, en algunos casos los cambios se empiezan a presentar antes de la ausencia de la regla.
Causas asociadas a la Menopausia
La Menopausia es considerada una etapa en la edad reproductiva que se presenta en todos los casos y está determinada por el aspecto genético, por lo cual las causas están determinadas ya en nuestro material genético.
En algunos casos esta condición se llega a presentar antes de la edad que con más frecuencia se desarrolla y es llamada Menopausia Precoz, puede aparecer antes de los 45 años o se pudiera retrasar. En nuestro país la Menopausia se llega a presentar alrededor de los 47 u 49 años en promedio pero generalmente podemos establecer un intervalo entre los 47 y los 52 años.
¿Cómo identificarla?
La serie de síntomas que llega a tener una paciente puede ser muy amplia, los síntomas signos que mayormente se presentan generalmente se deben a la baja producción de estrógenos
Los síntomas más frecuentes que llegan a tener este grupo de pacientes son:
- Cansancio
- Fatiga
- Debilidad
- Dolor articular
- Dolor muscular
Posteriormente en orden de frecuencia aparece el Síndrome Vasomotor que son una serie de síntomas donde los dos principales son los bochornos y la sudoración nocturna, el bochorno justamente es esa sensación de sofoco que empieza en la parte superior del cuerpo y un aumento de la temperatura corporal, posteriormente se asocia a un enfriamiento y esto derivado justamente por la misma fisiología y a la baja producción de estrógenos y el efecto que tiene a nivel del centro termorregulador del hipotálamo.
También suelen aparecer alteraciones en el sueño insomnio o dificultad para conciliar el mismo y en un sintoma que con menos frecuencia se escucha es el Síndrome Genitourinario en donde se puede presentar:
- Resequedad vaginal
- Dolor
- Incontinencia urinaria
- Urgencia urinaria
- Nicturia
- Dolor en la relación sexual
Opciones de tratamiento
Se establece un tratamiento según sintomatología que se llegue a presentar y generalmente se va a basar en resolver la baja producción de estrógenos el cual se va a dividir en tratamiento hormonal y tratamiento no hormonal.
El mejor tratamiento es la Terapia Hormonal de Sustitución, pero su uso va a depender de la valoración integral previa que se realice que incluye Densitometría Ósea, Mastografía, Ultrasonido Vaginal y algunos estudios de sangre como: Glucosa, Insulina, Perfil Tiroideo y medición lípidos.
Cuando una paciente no es candidata a la Terapia Hormonal de Sustitución se recurre a la Terapia no Hormonal.
La identificación oportuna y la valoración integral permite al paciente mejorar su calidad de vida.