Miomas uterinos: un problema genético, hereditario u hormonal que afecta a más del 50% de las mujeres
Los miomas afectan de un 5 a un 65% de las mujeres en México entre la tercera y cuarta década de vida.
¿Qué son los miomas?
Se conoce como miomas a las tumoraciones que se desarrollan dentro del útero o sus ligamentos, están compuestos de tejido fibroso, regular y firme, y al menos 99% de este tipo de tumores suelen ser benignos. Son conocidos también como leiomiomas o fibromas.
No existe una causa como tal, sin embargo, se atribuye a factores genéticos o hereditarios (son lesiones que se presentan en más de una integrante de la línea familiar) o bien a un exceso en los factores hormonales de origen endógeno o exógeno (sobrepeso, obesidad, toma no vigilada de hormonales, consumo de alimentos biológicamente modificados o con hormonas añadidas).
Otros factores de riesgo que pueden desencadenar esta enfermedad son:
- Estar en edad reproductiva con sobrepeso u obesidad
- No haber tenido embarazos
- Infertilidad
- Uso de hormonales por periodos prolongados y sin vigilancia médica
¿Cuál es el proceso para diagnosticarlos?
Se identifican a través del interrogatorio y un examen clínico, además de la exploración por tacto la cual es de vital importancia, ya que ésta revelará la forma y el tamaño de los genitales internos.
Durante el interrogatorio es posible sospechar de miomatosis, porque podrá identificarse si existen alteraciones en el patrón de sangrado menstrual habitual (duración, intensidad, frecuencia) si la historia de sangrado es prolongada, es decir, el trastorno de sangrado ha permanecido por más de 6 meses, se harán presentes síntomas relacionados con la anemia (taquicardia, cansancio, dolor de cabeza, desmayos, palidez, somnolencia). El segundo síntoma más frecuente es el dolor pélvico y síntomas por compresión a órganos vecinos (estreñimiento, distensión abdominal, síntomas urinarios similares a una infección).
Posteriormente para confirmar el diagnóstico se solicitará un ultrasonido pélvico o transvaginal y en casos específicos se deberá realizar una tomografía pélvica o una resonancia magnética, estudios de sangre, además de una biometría hemática completa, tiempos de coagulación y perfil hormonal ginecológico. Si la paciente se encuentra en estudio por infertilidad, es necesario realizar una histerosonografía o una histerosalpingografía.
¿Cuáles son las opciones de tratamiento?
Hay varios tipos de tratamiento, pero dependerá de la edad de la paciente y su deseo, en relación a buscar un embarazo, así como del tamaño y la localización de los miomas:
- Tratamiento conservador: Es para aquella paciente asintomática y con lesiones muy pequeñas.
- Tratamiento médico: Los medicamentos hormonales tendrán el objetivo de regularizar el estímulo hormonal circulante, de este tipo existen los anticonceptivos orales a bajas dosis, progestinas (orales o intramusculares), análogos de GnRH (acetato de leuprolide), fármacos MSRP como el Acetato de ulipristal o la mifepristona.
- Tratamiento quirúrgico: Se encuentra la Miomectomía la cual busca retirar únicamente los miomas y la Histerectomía la cual extrae por completo la matriz con las lesiones, ambas pueden ser realizadas de forma abierta o por vía laparoscópica.
- Otros: Uso de láser ExAblate, tratamiento de embolización arterial por Radiología intervencionista
Lo que no sabías de los miomas
La mejor vía de prevención es acudir a chequeo ginecológico al menos una vez al año a partir del segundo año de que inicie la primera menstruación, mantener hábitos de vida saludables, controlar el peso y usar los métodos anticonceptivos sólo por prescripción médica, llevando una vigilancia frecuente de los mismos.
Así mismo mantenerse informada sobre las actualizaciones en torno a este tema le permitirá conocer estas y otras formas de tratamiento como:
- Las circunstancias que hacen a un mioma susceptible de ser tratado sólo por cirugía son: Dimensión mayor a 5 cm, si causan hemorragias persistentes, infertilidad, compresión a órganos vecinos, si se encuentran dentro de la cavidad uterina, o si crecen de manera brusca en cualquier etapa de la vida
- La FDA ha autorizado el uso del DIU con levonorgestrel para el tratamiento del sangrado uterino anormal, reduciendo la cantidad de sangrado y la propensión a la anemia
- Se ha demostrado que la corrección en la deficiencia de Vitamina D, evita la proliferación celular de los miomas