Muelas del Juicio: ¿Qué son y cuándo es necesario extraerlas?
Las Muelas del Juicio, también conocidas como Terceros Molares, son los últimos dientes en erupcionar, normalmente entre los 18 y 20 años de edad. Aunque en algunos casos pueden no generar problemas, es común que estas muelas causen molestias o afecten la calidad de vida, requiriendo tratamiento o extracción.
¿Qué problemas pueden causar las Muelas del Juicio?
Las Muelas del Juicio pueden provocar diversos problemas, especialmente si no tienen suficiente espacio para erupcionar correctamente o si quedan parcialmente cubiertas por la encía. Entre los problemas más comunes están:
- Dolor: la presión que ejercen las Muelas del Juicio al intentar salir puede causar molestias en la mandíbula y los dientes cercanos
- Inflamación: es habitual que las encías alrededor de las Muelas del Juicio se inflamen, lo que puede dificultar la masticación y generar incomodidad
- Mal aliento: si las Muelas del Juicio no erupcionan por completo, es posible que los restos de comida y bacterias se acumulen, lo que puede causar mal aliento o infecciones
- Gingivitis y Periodontitis: las Muelas del Juicio pueden provocar desde problemas de encías leves, como Gingivitis, hasta infecciones más graves como la Periodontitis, que afecta a los tejidos que sostienen los dientes
¿Cuándo es necesario extraer las muelas del juicio?
La extracción de las Muelas del Juicio se recomienda cuando causan síntomas que afectan la calidad de vida del paciente. Los principales motivos para extraerlas son:
- Dolor persistente: si el dolor en la zona de las Muelas del Juicio es constante, podría ser señal de que están mal posicionadas o impactadas
- Inflamación crónica: la inflamación de las encías alrededor de las muelas del juicio puede ser un indicativo de infección o falta de espacio para que el diente erupcione adecuadamente
- Mal sabor de boca: si notas un mal sabor persistente, puede ser una señal de infección o acumulación de bacterias en la zona
¿Cómo se realiza la extracción de las Muelas del Juicio?
La extracción de las muelas del juicio es un procedimiento común que generalmente se realiza bajo anestesia local. El proceso típico es el siguiente:
- Aplicación de anestesia local: se anestesia la zona para asegurarse de que el paciente no sienta dolor durante la intervención
- Extracción del diente: una vez que la anestesia ha hecho efecto (después de unos minutos), el dentista o cirujano retira la Muela del Juicio
- Suturas: dependiendo del caso, se pueden realizar puntos de sutura para cerrar la herida
- Recuperación: posterior a la cirugía, el paciente recibe indicaciones para el cuidado en casa, que incluyen la prescripción de antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios para controlar el dolor y prevenir infecciones
Cuidados después de la extracción
Después de la extracción de las Muelas del Juicio, es común que se presenten algunas molestias, siendo la inflamación la más habitual. Aquí algunos consejos para manejar la recuperación:
- Compresas frías: durante las primeras 24 horas, las compresas frías ayudan a reducir la inflamación
- Compresas tibias: después de uno o dos días, se recomienda usar compresas húmedas y tibias para continuar con el control de la inflamación
- Medicamentos: el uso de antiinflamatorios y analgésicos es fundamental para mantener el dolor bajo control. Además, en algunos casos se pueden recetar geles tópicos para ayudar a reducir la hinchazón
Complicaciones más comunes
Si bien la extracción de las Muelas del Juicio es un procedimiento sencillo, pueden surgir complicaciones leves. La Inflamación es la más común, pero también pueden ocurrir infecciones si no se siguen correctamente las indicaciones postoperatorias. En caso de presentar fiebre, dolor intenso o pus, es importante acudir al dentista lo antes posible.
Las Muelas del Juicio no siempre necesitan ser extraídas, pero cuando causan dolor, inflamación o infecciones recurrentes, su extracción es la mejor opción para mejorar la calidad de vida del paciente. Si notas alguno de los síntomas mencionados, es importante acudir a un especialista en Cirugía Oral para recibir el diagnóstico y tratamiento adecuado.