Nódulo tiroideo: enfermedad generalmente inofensiva (Parte 1)
Los Nódulos son pequeños bultos o tumores localizados en una parte de la glándula tiroides, generalmente no son cancerígenos. Se ha descubierto que ciertos tipos de radiación aumentan el riesgo de formación de nódulos y el tratamiento varía dependiendo del origen.
¿Qué es un nódulo?
Un nódulo es un pequeño bulto o tumor localizado en una parte de la glándula tiroides. Es diferente de un bocio, que se trata de un agrandamiento. Sin embargo, una glándula tiroides agrandada (bocio) puede tener uno o más nódulos. Siendo estos un área de la glándula que aparenta ser diferente del resto, al estar levantada o tener una textura diferente. Este padecimiento es sumamente común. En la mayoría de los casos no son cancerígenos, pero un endocrinólogo debe evaluarlos todos.
Estos tumores pueden estar llenos de líquidos (quiste) o ser sólidos, formados por tejido de tiroides. Pueden haber mezclas de sólidos y quistes que pueden sangrar internamente y que aparentemente crecen en cuestión de horas. Los nódulos pueden ser muy pequeños, de menos de un milímetro, o medir varios centímetros. Pueden salir solos o con otros de diferentes tamaños en la misma glándula. Los nódulos no son una enfermedad, pero son un signo de un problema en la glándula tiroides. Las causas de los nódulos deben ser determinadas.
No todos los nódulos son cancerígenos
Entre el 90 y el 95% resultan ser tumores benignos no cancerígenos del tejido de la tiroides. Sólo alrededor del 5% son cancerígenos. Debido a la posibilidad de que un nódulo sea cancerígeno, todos los nódulos deben ser evaluados por completo. Entre las causas de los nódulos benignos se encuentran los quistes (acumulación de fluido), tejido tiroides hiperactivo (nódulo hiperactivo), o varios tumores en una glándula tiroides agrandada (bocio multinodular).
Síntoma principal
La mayoría de las veces no se presentan síntomas, pero pueden presionar el cuello y causar la sensación de un bulto en la garganta, dificultad al tragar, asperidad o tos. Pueden producir hormona tiroides en exceso (nódulo hiperactivo) y síntomas de hipertiroidismo - pulso acelerado, pérdida de peso, nerviosismo, diarrea y temblores. A veces se encuentran nódulos en una tiroides que presenta menos actividad de lo normal, un problema conocido como hipotiroidismo. Entre los síntomas se encuentran pulso lento, aumento de peso, estreñimiento, depresión y fatiga.
Problema común que no causa problemas
Este padecimiento es muy común. Se estima que alrededor del 50% de la población desarrolla nódulos pequeños e indetectables en algún momento de su vida. La mayoría nunca son detectados y no causan problemas. De hecho, sólo pueden ser encontrados con un ultrasonido, unos rayos-x especializados de la glándula. Solo entre un 4 y un 7% de la población tiene un nódulo suficientemente grande para que un médico lo pueda encontrar mediante una palpación.
Son más comunes en las mujeres y la incidencia aumenta con la edad. Alrededor del 4 por ciento de las mujeres de 20 años de edad tienen un nódulo palpable, mientras que un 9 por ciento de las mujeres de más de 70 años tienen el mismo tipo de nódulo. Se encuentran nódulos en alrededor del 1% de hombres.