Párpado Caído: ¿podrías perder la vista?
El Párpado Caído, conocido también como Ptosis Palpebral, es el descenso del nivel normal que tiene el párpado. En casos severos, esta afección impide la visión de uno o ambos ojos.
Generalmente, se le llama Párpado Caído a toda condición del párpado, por ejemplo, suele confundirse con la Dermatochalasis, que ocurre cuando hay un exceso de piel en el párpado superior; sin embargo, el Párpado Caído es literalmente cuando el párpado está más abajo de la línea normal en la que se debería encontrar.
Los pacientes suelen notar esta afección cuando se ven al espejo, mediante fotografías, por comentarios de otras personas o porque tienen problemas de la vista.
La causa más frecuente del Párpado Caído es la edad; algunas otras son:
- Un procedimiento quirúrgico
- Factores congénitos
- Golpes
- Una enfermedad en la que haya debilidad muscular generalizada
Siempre es importante evaluar la causa del Párpado Caído para poder ofrecer un tratamiento adecuado. La opción más común es la cirugía, aunque también existen tratamientos farmacológicos.
Las ventajas del tratamiento quirúrgico del Párpado Caído son:
- Corrección de la posición del párpado
- Recuperación de la vista (si es que se vio afectada)
- Resultados estéticos en la posición de los ojos
Como en cualquier otra operación, el paciente tiene riesgo de desarrollar una infección, mala cicatrización y asimetría en los ojos (que se puede resolver en una segunda intervención).
Es importante diferenciar la Cirugía del Párpado Caído de una intervención estética como la Blefaroplastía convencional, la cual no repara realmente la causa del Párpado Caído y puede dar resultados no deseados. Por ello, es primordial realizar una evaluación oftalmológica adecuada y completa para encontrar la causa de este problema y ofrecer el tratamiento apropiado.