Prevención: la mejor arma vs el cáncer de mama
Actualmente el cáncer de mama es uno de los tumores que se diagnostican en México y el mundo con mayor frecuencia. Se estima que 1 de cada 7 mujeres será diagnosticada con cáncer de mama a lo largo de su vida.
Entre las mujeres con este diagnóstico, solo del 5 al 10 por ciento de ellas tienen una mutación genética asociada al cáncer de mama y menos de un 1/3 tienen antecedentes familiares de cáncer de mama. Como podemos notar, son muchos los factores que están involucrados en el desarrollo de este padecimiento. Algunos de estos factores no son modificables, pero otros si se pueden modificar.:
Factores que NO se pueden modificar:
- Edad
- Raza
- Historia familiar
- Mutación genética
- Menarquia (primer período) temprana
- Menopausia tardía (último período)
- Alta densidad mamaria
- Exposición a radiación para el tratamiento de otros tumores
Factores que SÍ se pueden cambiar:
- Peso e índice de masa corporal (IMC)
- Actividad física
- Consumo de alcohol
- Consumo de tabaco (fumar cigarrillos)
- Uso de la terapia de reemplazo hormonal (TRH)
- Trabajo nocturno
- Exposiciones ambientales a toxinas
ACTIVIDAD FÍSICA. Las mujeres deben hacer un esfuerzo para mantenerse físicamente activas, limitar el consumo de alcohol y no fumar. La pérdida de peso moderada (5 a 10 por ciento) en mujeres con sobrepeso reduce significativamente el riesgo de desarrollar cáncer de mama.
NO FUMAR: Estudios recientes hacen evidente el vínculo entre fumar y un mayor riesgo de cáncer de mama.
EXPOSICIÓN A ESTRÓGENOS. Se recomienda que las mujeres planifiquen tener su primer embarazo a una edad temprana (antes de los 35 años) para reducir el riesgo de desarrollar cáncer de mama. A las mujeres posmenopáusicas les conviene minimizar el uso de estrógenos y progesterona (terapia de reemplazo hormonal o TRH).
OTRAS CONSIDERACIONES EN LA DIETA
- Frutas y verduras: Existe evidencia de que la alimentación de las mujeres jóvenes influye en el riesgo de padecer cáncer de mama en la edad adulta. Un estudio reciente encontró que las niñas que seguían una dieta alta en fibra (rica en frutas frescas, verduras y granos integrales) tenían un menor riesgo de cáncer de mama de adultas.
- Vitaminas: Estudios han comprobado que las dietas ricas en alimentos como las zanahorias y las verduras de hoja verde conducen a un aumento de los niveles sanguíneos de los carotenoides (SÍMBOLO ALFA)- y (SÍMBOLO BETA)- caroteno. Estas sustancias disminuyen el riesgo de desarrollar cáncer de mama ER-negativo. Además, la vitamina C se asocia con una disminución del riesgo de cáncer de mama ER-positivo.
- Alcohol: Existe un vínculo sólido entre el consumo de alcohol y el cáncer de mama. Las mujeres de mediana edad que toman al menos una bebida al día tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
- Grasas: El consumo de grasa dietética aumenta la grasa corporal y a su vez, ésta resulta en un aumento de la producción de estrógenos. Parece que, cuanto más grasa corporal tiene una mujer mayor es su riesgo de desarrollar cáncer de mama. Conviene evitar las grasas saturadas y trans. Por otra parte, el consumo de grasas monoinsaturadas (ácidos grasos omega-3) con moderación promueven la salud de las mamas ya que tienen propiedades antiinflamatorias. Éstas se encuentran en alimentos tales como: semillas de lino, nueces, espinacas, brócoli, soya, anchoas, salmón y atún.
- Dieta mediterránea: Esta dieta es rica en cereales integrales, aceite de oliva, nueces, pescados, frutas y verduras. Estos ingredientes proporcionan una combinación de grasas promotoras de la salud y otras sustancias antiinflamatorias. En un estudio, las mujeres con cáncer de mama tuvieron un menor riesgo de recurrencia de la enfermedad cuando seguían la dieta mediterránea. En otro estudio, los investigadores encontraron que las mujeres que siguieron esta dieta tenían un menor riesgo de padecer cáncer de mama.
- Azúcar: Las calorías de los alimentos y bebidas azucarados pueden provocar un exceso de grasa corporal, lo que aumenta el riesgo de cáncer de mama. El azúcar aumenta los niveles de insulina, lo que puede promover el crecimiento de las células del cáncer de mama. Puede haber un vínculo aún más directo: un estudio reciente en ratones descubrió que una dieta alta en azúcar conducía a la aparición más rápida del cáncer de mama y a una diseminación más rápida del cáncer de mama metastásico.
- Carne asada: El carbón contiene sustancias que pueden promover el cáncer de mama por lo tanto su consumo debe de ser limitado. La carne magra es la opción más saludable para sus mamas y el resto de su cuerpo.
INTERVENCIONES MÉDICAS DE PREVENCIÓN
Para aquellas mujeres con un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama, debido a una mutación genética o antecedentes familiares de cáncer de mama, se pueden tomar medidas adicionales:
- Medicamentos reductores de riesgo. Se pueden tomar medicamentos para reducir el riesgo de desarrollar cánceres de mama sensible a hormonas
- Cirugía reductora de riesgo. La extracción de tejido mamario (mastectomía profiláctica o mastectomía preventiva) también se puede utilizar para disminuir el riesgo de cáncer de mama. Esta operación se asocia con una disminución del riesgo de cáncer de mama en todos sus tipos. Las mastectomías profilácticas a menudo se combinan con la reconstrucción mamaria inmediata (si así lo desea la paciente).
Además, la extirpación de ambos ovarios en una mujer premenopáusica puede reducir el riesgo futuro de desarrollar cáncer de mama y reducir el riesgo de desarrollar cáncer de ovario.