Reducción mamaria: estética y funcional
La reducción mamaria es un procedimiento quirúrgico que se realiza cuando una paciente padece de gigantomastia y causa problemas crónicos de dolor o cuando no está satisfecha con el tamaño de sus mamas
Dr. Arie Dorenbaum Fastlicht
La indicación que es considerada médica, no tanto por cosa estética, para cuando es necesaria una reducción mamaria es cuando la paciente padece de gigantomastia, que son las mamas muy pesadas, muy grandes, que le causan molestias en el cuello, formación de pliegues en los hombros e irritación crónica en el pliegue que se forma entre la mama y el abdomen. A veces el peso de las mamas es tan grande que las mujeres sufren desde el punto de vista médico. Hay quienes tienen problemas crónicos de dolor de cuello y problemas en la columna vertebral.
También hay mujeres que no tienen las mamas tan pesadas ni tan grandes pero sí las tienen muy grandes para la dimensión de su cuerpo y esto les causa muchas molestias en cuanto a realizar actividades rutinarias de su vida se refiere, como el ejercicio por ejemplo, también les puede causar problemas en la vestimenta y cuando son jovencitas a veces también son motivo de burla por los compañeros en la escuela; esto puede afectar gravemente en la autoimagen de la paciente, por estas razones se acude a una reducción mamaria.
Tratamiento de la mamoplastia
Este tratamiento es una cirugía. Se hacen cortes en la piel, se extrae tejido mamario para que quede más o menos la mama del tamaño que la paciente quiere, por lo general es con una noche de hospitalización y su duración es aproximadamente de unas 3 horas, es algo molesta, pero si la paciente toma los analgésicos tal como se le recomienda se la pasa algo tranquila; tiene que tomar en cuenta que necesita alrededor de 3 semanas de recuperación en las que no puede manejar ni hacer ejercicio.
Por lo general se dejan unos drenajes que se retiran entre 5 y 7 días después de la cirugía, dependiendo de la cantidad de líquido que sale, esto para evitar que ese líquido se acumule bajo la piel, por eso los drenajes. Es una cirugía que tiene mucho impacto en la vida de la paciente porque se la cambia completamente, alguien que no puede moverse, que se siente muy pesada, muy molesta con el tamaño de sus mamas por lo general sale satisfecha de esta cirugía.
El resultado final se ve reflejado más o menos a los 2 o 3 meses, ya cuando bajó toda la inflamación, y las cicatrices tardan en llegar a un aspecto normal, de tono claro, similar al resto de la piel, más o menos en un año, pero desde los 2-3 meses la paciente se puede ver muy bien.