Reflujo Gastroesofágico: ¿Cómo curarlo sin cirugía?
El tratamiento farmacológico, como el uso de antiácidos e inhibidores de bomba de protones, es la opción no quirúrgica más común para el Reflujo Gastroesofágico.
Por su parte, el tratamiento por Endoscopía, como el procedimiento Stretta, es una opción más novedosa y no quirúrgica. Consiste en aplicar ondas de radiofrecuencia en el esófago para fortalecer el esfínter esofágico inferior y controlar el Reflujo.
Los antiácidos e inhibidores de bomba de protones son el tratamiento principal para controlar los síntomas del Reflujo. Sin embargo, el uso crónico de antiácidos puede tener efectos adversos, como la promoción de Pólipos Gástricos.
Las opciones no quirúrgicas, como el tratamiento farmacológico y por Endoscopía, ofrecen alternativas efectivas para el manejo del Reflujo Gastroesofágico. Los resultados del tratamiento endoscópico tienen una duración aproximada de 10 años, mientras que los del quirúrgico 15, pero pueden repetirse si es necesario.
¿En qué casos se requiere cirugía?
La Cirugía Antirreflujo, como la Funduplicatura, es una opción definitiva para el control de los síntomas, especialmente en pacientes jóvenes. Este procedimiento es recomendado para personas que presentan Hernias Hiatales de gran tamaño que están provocando Reflujo significativo.
La selección del tratamiento depende de las características y necesidades del paciente. Los pacientes que no tienen Hernias pueden ser candidatos al tratamiento por Endoscopía; aquellos con una Hernia Hiatal grande generalmente requieren cirugía.
Es importante realizar una evaluación integral del paciente y considerar estudios como la Manometría para seleccionar el tratamiento más adecuado.
Adoptar medidas de prevención y buscar tratamiento apropiado son fundamentales para controlar la enfermedad. Si tienes síntomas de Reflujo Gastroesofágico, es recomendable que acudas con un especialista en Gastroenterología o Cirugía General.
Cuidar el peso corporal, evitar alimentos desencadenantes como condimentos, grasas y café, y adoptar hábitos dietéticos saludables son medidas básicas para prevenir el Reflujo Gastroesofágico.