¿Rehabilitación del piso pélvico? ¿Cómo, cuando y por qué? ¡Te lo contamos!
La rehabilitación del piso pélvico es un procedimiento que corrige y previene disfunción de las estructuras del piso pélvico evitando afecciones como incontinencia urinaria o fecal y dolor pélvico. ¡Conoce todo sobre este tratamiento!
¿Qué es el piso pélvico?
El suelo pélvico es un conjunto de músculo y ligamentos que se encargan de sostener a la vejiga, útero, vagina y recto. Alguna anormalidad con este musculo puede afectar severamente el funcionamiento de los órganos pélvicos requiriendo la atencion de un especialista en rehabilitación pélvica.
¿Cuál es el daño causado?
Como ya mencionábamos el daño en el piso pélvico y su tratamiento tardío desencadena diferentes afecciones como:
- Incontinencia Fecal: Es la incapacidad por mantener las heces siendo expulsadas en forma solida o liquida desde el recto ocasionando incapacidad de los esfínteres y músculos, así como daño neurológico sobre el control de los movimientos intestinales.
- Incontinencia urinaria: Es la perdida involuntaria de orina que se clasifica de dos formas: Incontinencia Urinaria de Esfuerzo la cual como su nombre lo menciona está relacionada con el esfuerzo en actividades como toser, estornudar, caminar o corre. Por otro lado, está la Incontinencia Urinaria de Urgencia que son aquellos casos en donde orinar se vuelve frecuente e incontrolable.
Causas, diagnóstico y tratamiento
Para tratar los problemas del piso pélvico es necesario acudir con un especialista en Fisioterapia el cual realizará un historial clínico del paciente, pruebas como ecografías, electromiografías, así como una exploración física que incluye análisis de postura, integridad de diafragma y abdomen, además de la integridad del suelo pélvico.
El tratamiento de rehabilitación del piso pélvico del paciente oncológico se realiza en dos fases: la primera en la fase preventiva en donde se realiza un programa de ejercicios para fortalecer el piso pélvico y acuda a la cirugía con mejor continencia y menor disminución de las funciones del aparato urogenital.
Por otro lado, se encuentra la fase preventiva para casos postquirúrgicos y que conlleva lo descrito en la EOM 0-3.
El cáncer puede ser unos de los factores que puede provocar dañar o cambiar su histología ocasionando cambios en las funciones en órganos como el recto, vejiga, próstata, endometrio, ovarios, entre otros. Así también es un efecto secundario del tratamiento al cáncer como la radioterapia que puede causar disuria, dificultad para iniciar la micción, vaciado incompleto de la vejiga o fugas de orina.
En el caso de la quimioterapia afecta al sistema nervioso y con ello afectar la inervación de los músculos pélvicos. En pacientes con tratamiento quirúrgicos pueden ser propensos a daño muscular y nervioso a causa de incisiones que pueden dañar la eficiencia de contracción. El trasplante de médula ósea con dosis alta de quimioterapia ocasiona inflamación de la vejiga.
Ejercicios de Kegel y más…
Los más conocidos son los ejercicios de Kegel que se idearon con la finalidad de controlar la continencia urinaria pero aun quedan dudas de como realizarlos correctamente y cuantas veces, para ello se encuentran los especialistas en Fisioterapia.
Loe ejercicios están diseñados para fortalecer el piso pélvico y tienen como objetivo reeducar y tratar la incontinencia urinaria creando un programa personalizado para cubrir las necesidades de cada paciente y varía según la posición, cantidad y el tipo de contracción de la siguiente manera:
Tipo de contracciones: Las hay lentas al 65% de las fibras por 10 segundos para dar tono y sostén de los órganos pélvicos y están las rápidas a 35% por 2 segundos para lograr la continencia.
Posición: tiene relación con la intensidad que se basa en la escala de Oxford Modificada para medir el tiempo de contracción, de acuerdo a ello se determina la posición que puede ser de dos formas: decúbito Supino con las rodillas extendidas aislando e inhibiendo el resto de los músculos que son considerados sinergistas y decúbito supino incluyendo estos músculos.
Cantidad: se deberán de realizar de 10 a 15 repeticiones largas y cortas en dos series por día durante la mañana y tarde, además de 5 contracciones cortas y 5 lentas durante periodos de espera.
Otro tipo de ejercicios son los hipopresivos los cuales consisten en posturas que buscan realizar un vacío de la cavidad abdominal para conseguir una contracción refleja de la musculatura del piso pélvico además de reacomodar las tensiones estructurales que suspenden los órganos del abdomen bajo.
Los ejercicios Biofeedback o Retroalimentadores un método no invasivo e indoloro y es realizado con un aparato que a través de electrodos que se colocan de forma externa en el perímetro anal y cuantifican las contracciones para poder medir la tensión y relajación del grupo muscular y con ello tener control, conciencia y coordinación al contraer y relajar.
Por último, se encuentra la estimulación eléctrica para reeducar los músculos del perineo a través de estimulaciones eléctricas en las areas intravaginales o intrarectales para lograr una contracción muscular voluntaria en aquellos pacientes que tienen una debilidad importante, sensibilidad disminuida o inexistente.