Si tu pareja te dice “adiós”, ¿Cómo enfrentarlo?
Cuando la pareja abandona a una persona suelen presentarse muchos miedos, frustraciones, dolor y rompimiento de ilusiones y promesas. El abandonado es el que sufre más, por eso es importante tener apoyo para enfrentar la situación
Todos los seres humanos tienen dependencia afectiva y social. Ésta puede ser un componente normal y saludable, incluso necesaria para la vida de pareja. En algunos casos de ruptura amorosa, según cual sea el grado de dependencia, nos encontraríamos ante una dependencia afectiva dañina que impide seguir con la vida cotidiana.
La ruptura
El momento de la ruptura puede ser un buen momento para plantearse qué está sucediendo y valorar qué tipo de relación se tenía hasta ese momento. Analizar qué situaciones personales nos despierta esta nueva situación y qué temores aparecen. Con frecuencia, los amigos y familia se ponen de parte de la persona abandonada y hacen ver que realmente la relación de pareja no era saludable. Sin embargo, la persona abandonada se siente hundida y llorosa, al borde de la Depresión y piensa que sólo regresando con la persona amada eso se esfumará.
Inevitablemente el miedo a la soledad y la Baja Autoestima predominan en los pensamientos desvalorizándose continuamente, o idealizando a la ex pareja con el empeño de volver con ella. Dependiendo del grado de dependencia afectiva la persona puede ser más o menos capaz de darse cuenta de si realmente la relación que se acaba de romper era beneficiosa para ella o no. Quien tiene una intensa dependencia afectiva le será más difícil resistirse a volver con su pareja, aunque la relación sea nociva para ella.
“No puedo vivir sin ti”
Esta es la frase recurrente de un adicto a la pareja, consultar a un profesional en el momento de ruptura de una relación de pareja sería adecuado. A través de la terapia, se puede ayudar a la persona a realizar el proceso de duelo que representa la pérdida de un ser querido. De inicio se analiza el grado de dependencia afectiva; ver si esa dependencia no aparece solo en sus relaciones de pareja, sino también en otro tipo de relaciones amistosas o familiares.
Las personas dependientes afectivamente se caracterizan por la manifestación de comportamientos adictivos en la relación interpersonal, basados en una actitud dependiente en relación al sujeto del que se depende. Suelen ser personas vulnerables emocionalmente y tienden a elegir parejas explotadoras o abusivas mental y físicamente. En estos casos, es más necesaria que nunca la ayuda Psicológica porque una tendencia del dependiente emocional promueve la repetición del mismo patrón de conducta: buscará una pareja tras otra con las mismas características. Con esto se genera un patrón de desgaste emocional cada vez mayor.
En el caso de la persona dependiente emocionalmente, predomina una excesiva necesidad de afecto que a veces le lleva a negar la evidencia de algunas informaciones que le proporciona el entorno, con lo que se autoengaña para poder proseguir en una relación nociva. También es frecuente que los dependientes afectivos busquen un determinado tipo de pareja que tiende a humillarlo y pueden llegar a ser víctimas de situaciones que menoscaben su Autoestima. Por ello es importante acudir con un especialista que ayude a canalizar el dolor que se siente, la pérdida y el sentimiento de apego para poder curar correctamente.