TDAH: ¿cuáles son las causas? (Parte 1)
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) es una entidad neurofisiológica con alteraciones neuroquímicas a nivel de la corteza prefrontal.
¿Cómo identificar el trastorno por déficit de atención e hiperactividad?
Los psiquiatras diagnostican el trastorno por déficit de atención e hiperactividad por alteraciones en la conducta. Las alteraciones de conducta se manifiestan en una persona que es muy inquieta, no puede quedarse sentada mucho tiempo, constantemente está en movimiento, no puede terminar sus tareas o las comienza, pero le cuesta mucho trabajo terminarlas, o bien, tiene problemas para organizarse. Otro síntoma es que un paciente con este trastorno, muchas veces, si tiene cosas que hacer no sabe por dónde comenzar o cómo darles orden a las cosas para brindarle un sentido.
Manifestaciones más comunes
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad tiene diferentes manifestaciones en niños, adolescentes y adultos, debido a que existen pequeñas diferencias en cuanto al síntoma predominante y a la edad.
En niños, se destaca por el hecho de que no puedan mantener la atención, por tal motivo es muy común que los maestros se quejen del niño porque está muy distraído o porque no pone atención en la clase, o bien, en sus tareas no guarda la organización que se requiere.
Síntomas en adolescentes y adultos
En los adolescentes, de las cosas más frecuentes son las imprudencias, donde los choques automovilísticos prevalecen, debido a la distracción de la cual ellos son objeto. En los adultos, el TDAH aparece como una constante inquietud donde no les es posible estar enfocados en una sola cosa.
Muchas veces los trabajos que son multitareas o multitasking son ideales para personas con trastorno por déficit de atención e hiperactividad pues es la manera en la que mejor desempeño tienen por el hecho de estar pensando distintas cosas o por cambiar de una tarea a la otra para finalmente obtener algún resultado.