Trasplante Hepático: Cuáles son los beneficios y cuándo debe realizarse

Trasplante Hepático: Cuáles son los beneficios y cuándo debe realizarse

Editado por: Luis Ángel Cortina Sánchez el 30/08/2024

El Trasplante Hepático es una intervención quirúrgica compleja y de vital importancia para pacientes con Insuficiencia Hepática Terminal.


Este procedimiento, que reemplaza un hígado dañado por uno sano, puede extender la vida del paciente y mejorar significativamente su calidad de vida. Sin embargo, es una opción que se reserva para casos en los que otros tratamientos no han logrado detener la progresión de la enfermedad.


¿En qué consiste el Trasplante Hepático?

El Trasplante Hepático consiste en reemplazar un hígado enfermo que no puede cumplir sus funciones vitales por otro sano, donado por una persona viva o fallecida. Este procedimiento se considera el último recurso para pacientes con Enfermedades Hepáticas avanzadas o insuficiencia hepática aguda, donde la única alternativa es el trasplante​.


Tipos de Trasplante Hepático

El Trasplante Hepático puede llevarse a cabo utilizando diferentes tipos de donaciones, lo que influye en la complejidad del procedimiento y en el pronóstico del paciente.

  • Trasplante de Donante Fallecido: es la forma más común y consiste en utilizar un hígado completo o dividido en dos partes (trasplante "split") para beneficiar a dos pacientes, uno de los cuales suele ser un niño
  • Trasplante de Donante Vivo: implica la donación de un segmento del hígado por un donante vivo, que suele ser un familiar cercano del paciente; es posible debido a la capacidad del hígado para regenerarse
  • Trasplante Dominó: se lleva a cabo en casos especiales, como la Amiloidosis Familiar, donde el hígado del paciente original se trasplanta a otro paciente que puede beneficiarse de él por décadas antes de que aparezcan síntomas​


Indicaciones para un Trasplante Hepático

El Trasplante Hepático se considera en casos de insuficiencia hepática grave, que puede ser causada por varias condiciones médicas:

  • Cirrosis Hepática: es la causa más común de Insuficiencia Hepática que lleva a la necesidad de un trasplante. La Cirrosis puede ser causada por Hepatitis Viral Crónica (B o C), consumo excesivo de alcohol, o enfermedades metabólicas como la Hemocromatosis y la Enfermedad de Wilson​
  • Hepatitis Fulminante: se refiere a una Insuficiencia Hepática Aguda, donde el hígado falla repentinamente, lo que a menudo requiere un trasplante de emergencia
  • Cáncer de Hígado: en casos donde los Tumores Hepáticos no pueden ser extirpados mediante cirugía convencional, un trasplante puede ser la única opción curativa​


Beneficios del Trasplante Hepático

El Trasplante de Hígado ofrece múltiples beneficios, siendo el más significativo la prolongación de la vida del paciente. Entre otros beneficios se incluyen:

  • Mejora de la calidad de vida: muchos pacientes experimentan una mejora considerable en su calidad de vida postrasplante. Los síntomas debilitantes asociados con la insuficiencia hepática, como la Ictericia, la Fatiga extrema, y las Complicaciones neurológicas, suelen desaparecer
  • Recuperación de la Función Hepática completa: el hígado trasplantado puede realizar todas las funciones metabólicas y de desintoxicación necesarias, lo que permite al paciente llevar una vida relativamente normal​
  • Reducción de las complicaciones médicas: en muchos casos, un Trasplante de Hígado puede prevenir o revertir complicaciones graves como la Hipertensión portal, la Ascitis, y las Hemorragias varicosas​


Riesgos asociados con el Trasplante Hepático

A pesar de los beneficios, el Trasplante Hepático no está exento de riesgos. Estos riesgos pueden ser:

  • Rechazo del Injerto: ocurre cuando el sistema inmunológico del paciente ataca el nuevo hígado, percibiéndolo como un cuerpo extraño. Para evitar el rechazo, los pacientes deben tomar medicamentos inmunosupresores de por vida, lo que aumenta el riesgo de infecciones y otros problemas de salud​
  • Complicaciones Infecciosas: debido a la necesidad de inmunosupresores, los pacientes trasplantados son más susceptibles a infecciones graves. Las infecciones pueden afectar cualquier parte del cuerpo y pueden ser difíciles de tratar debido a la función inmunológica comprometida​
  • Complicaciones Quirúrgicas: como en cualquier cirugía mayor, existen riesgos de sangrado, formación de coágulos sanguíneos, y daños a otros órganos durante el procedimiento. Además, puede haber complicaciones con la conexión de los vasos sanguíneos y los conductos biliares​


Mitos y realidades sobre el Trasplante Hepático

El Trasplante Hepático es un procedimiento rodeado de mitos y conceptos erróneos que pueden generar miedo e indecisión entre los pacientes y sus familias. Aclarar estos mitos es fundamental para que los pacientes puedan tomar decisiones informadas.

  • Mito: "el Trasplante Hepático es una solución inmediata y definitiva"
  • Realidad: aunque el Trasplante Hepático puede salvar vidas, no es una solución instantánea. La recuperación puede ser prolongada y requiere un compromiso de por vida con el seguimiento médico, el uso de inmunosupresores, y un estilo de vida saludable​
  • Mito: "los donantes vivos pueden sufrir graves consecuencias de salud"
  • Realidad: La donación de una parte del hígado por un donante vivo es un procedimiento cuidadosamente planificado que solo se realiza si el donante está en óptimas condiciones de salud. El hígado tiene la capacidad de regenerarse, y la mayoría de los donantes se recuperan completamente sin efectos adversos significativos​
  • Mito: "el Trasplante Hepático solo es efectivo en jóvenes y personas sanas."
  • Realidad: los Trasplantes Hepáticos se realizan en pacientes de todas las edades y condiciones médicas, siempre que cumplan con los criterios de elegibilidad. La decisión se basa en la evaluación integral del paciente y su capacidad para beneficiarse del trasplante, independientemente de su edad
  • Mito: "una vez trasplantado, ya no existe riesgo de rechazo"
  • Realidad: el riesgo de rechazo del injerto está siempre presente y requiere el uso de inmunosupresores de por vida. Los rechazos pueden ocurrir en cualquier momento, incluso años después del trasplante, por lo que es fundamental el seguimiento constante y la adherencia al tratamiento
  • Mito: "los pacientes trasplantados no pueden llevar una vida normal"
  • Realidad: si bien los pacientes trasplantados deben tomar precauciones y seguir un régimen de tratamiento estricto, muchos pueden llevar una vida plena y activa. Con el cuidado adecuado, los pacientes pueden trabajar, viajar, y participar en actividades normales​


El Trasplante Hepático es un tratamiento complejo y de última instancia para enfermedades hepáticas graves. Aunque conlleva riesgos significativos, los beneficios son invaluables para los pacientes elegibles. La decisión de someterse a un trasplante debe tomarse en conjunto con un equipo médico especializado, considerando cuidadosamente todos los aspectos médicos, psicológicos, y sociales del paciente.


Este proceso exige una preparación rigurosa y un compromiso a largo plazo, tanto por parte del paciente como de su sistema de apoyo, para garantizar el mejor resultado posible.

Cirugía Oncológica en Monterrey