Trastornos de la motilidad gastrointestinal
Los trastornos de motilidad gastrointestinal más frecuentes son 3: el reflujo gastroesofágico, la dispepsia funcional y el síndrome de intestino irritable. El tratamiento se basa en el consumo de fármacos y en reducir la ingesta de grasas.
Dr. Miguel Ángel Valdovinos Díaz
La motilidad gastrointestinal se refiere a la función motora del tubo digestivo, esta es una de las principales funciones que tiene el aparato digestivo, es decir, la propulsión o el tránsito de los alimentos o de los productos digeridos de los alimentos a los largo del tubo digestivo, desde su ingreso en la boca hasta su eliminación, a través de la defecación.
Las alteraciones en la motilidad gastrointestinal pueden producir múltiples síntomas como son la dificultad para tragar el alimento, la retención por tiempos prolongados del alimento en el estómago, la diarrea o el estreñimiento con un tránsito intestinal excesivo e inclusive alteraciones en la continencia de la materia fecal.
Los tipos de alteraciones en la motilidad gastrointestinal
3 son los trastornos de la motilidad gastrointestinal más frecuentes, el primero de ellos es la enfermedad por reflujo gastroesofágico, que se caracteriza por el retorno del contenido gástrico hacia el esófago, esto es producido por una disfunción motora del esfínter esofágico inferior, es decir, de la válvula que existe entre el esófago y el estómago y que también se acompaña de alteraciones en la motilidad o el movimiento en el esófago.
El segundo es la Dispepsia funcional, generalmente estos pacientes sufren de trastornos en el vaciamiento del estómago y en la capacidad que tiene este órgano para acomodar los alimentos después de una comida.
El síndrome de intestino irritable es el tercero, puede cursar con aceleración del tránsito intestinal en cuyo caso puede ocurrir diarrea o bien, retraso en el tránsito intestinal, lo que produce estreñimiento crónico.
Tratamiento médico
La piedra angular en el tratamiento de los trastornos motores del tubo digestivo es el uso de unos fármacos que se conocen con el nombre de procinéticos y que tienen la función de acelerar o disminuir el tiempo de tránsito en los diferentes segmentos del aparato digestivo. Estos medicamentos se pueden utilizar tanto en la enfermedad por reflujo esofágico como en la dispepsia y en el síndrome de intestino irritable, además, algunos de estos trastornos requieren modificaciones en la dieta y en el tipo de consumo de alimentos, generalmente reduciendo el consumo de alimentos grasos.
Enfermedades y algunos medicamentos causan susceptibilidad a adquirir trastornos de motilidad gastrointestinal
Los pacientes susceptibles a tener trastornos en la motilidad gastrointestinal son aquellos que padecen enfermedades que secundariamente afectan al tubo digestivo, el ejemplo característico es la diabetes debido a que la diabetes de larga evolución afecta la actividad neurológica, que regula la motilidad del tubo digestivo, y por ello los diabéticos presentan con mayor frecuencia trastornos de la motilidad gastrointestinal. De manera menos frecuente existen alteraciones reumatológicas como la esclerosis sistémica progresiva, el lupus eritematoso que también producen alteraciones de la motilidad gastrointestinal.
Las enfermedades del sistema nervioso central pueden alterar la motilidad gastrointestinal y de manera más frecuente algunos medicamentos que se utilizan en la práctica clínica, como los antidepresivos, los anticolinérgicos, pueden también presentar o provocar alteraciones.